Redacción Canal Abierto | En el marco de un paro y movilización de la Federación Nacional Docente que forma parte de la CTA Autónoma y múltiples protestas gremiales y estudiantiles, comenzó el Operativo Aprender en todas las provincias del país.
Se trata de una evaluación estandarizada que ya se realizó el año pasado y en esta oportunidad abarcará a 1.210.620 alumnos de 31.300 escuelas, 6.150 de cuarto grado del primario, 746.756 de sexto grado del mismo nivel y 457.714 de quinto y sexto año del secundario. Además, de los 92.730 docentes encargados de tomar la prueba, habrá 32.474 veedores, 61.430 aplicadores, 120 personas que integrarán un cuerpo de “observadores federales” para la evaluación posterior y 1.135 coordinadores de cabeceras de distribución. El Operativo costará 380 millones de pesos.
Según sostuvo el ministro de Educación Alejandro Finocchiaro, esta vez se trata de una versión mejorada porque se ha “aprendido de los errores”. Por ejemplo, en la versión 2017 desde hace dos meses los alumnos responden preguntas similares a la que habrá en el aula a través de un simulador virtual que se encuentra en la Web. “Este año no habrá suspensión de clases y escuchamos la voz de los docentes respecto al formato de la prueba en sí”, agregó.
Sin embargo, desde la Federación Nacional Docente sostuvieron sus quejas basadas en planteos que hacen eje en el contenido más que en las formas: “Nos oponemos a estas evaluaciones por ser externas al sistema educativo, al ser diseñadas por funcionarios ligados con los intereses del Banco Mundial y la OCDE que actúan a favor de una educación que naturalice la desigualdad social, haciendo viable la profundización de la explotación y dominación de los pueblos”.
“Rechazamos estas evaluaciones que, lejos de intentar mejorar la Educación Pública, apuntan a su vaciamiento y desintegración buscando estigmatizar la figura del docente al responsabilizarlo de los supuestamente bajos niveles de aprendizaje de los alumnos”, sostuvo en un comunicado la organización.
Por su parte, Suteba aseguró que el Operativo “cambia la evaluación por control y medición; utiliza pruebas estandarizadas armadas por organismos externos; ignora la diversidad; utiliza a los docente como meros ejecutores”. En tanto, Sadop también lo rechazó y se pronunció a favor de la autoevaluación.
Hubo convocatorias a huelgas docentes en Chaco, Misiones, Neuquén, Santa Cruz y Buenos Aires, además de la resistencia resuelta por ADEMyS en la Ciudad de Buenos Aires y AMSAFE en Rosario.
También el ENAM de Banfield -famoso por ser el colegio donde asistieron 31 jóvenes desaparecidos por la última dictadura que integran la homenajeada “división perdida” y por su tradición fundacional de lucha- está tomado en rechazo a las evaluaciones y algunos centros de estudiantes de distintas escuelas llamaron a los alumnos a romper las pruebas.