Redacción Canal Abierto | En América Latina, en tan solo un año, el número de jóvenes desocupados se ha incrementado de 9,8 a 10,2 millones. Por primera vez en más de una década, la tasa de desempleo de este grupo de personas alcanzó casi el 20% en la región.
Si bien la crisis económica de Brasil (en 2015 su PIB se redujo un 3,8% y en 2016 un 3,6%) explica en parte este agravamiento, la región en su conjunto expresa índices poco esperanzadores. El triste ranking está encabezado por el país carioca con cerca del 30% de desempleo juvenil, seguido Uruguay (25,3%), Argentina (23,1%), Colombia (18,2%) y Chile (16,8%).
Según la OIT, la tasa de desocupación juvenil en América Latina es aproximadamente el triple que la de los adultos en la zona, e incluso más elevada en la mayoría de países del subcontinente. Los porcentajes más altos de jóvenes desocupados como proporción del total se hallan en Guatemala (55%), Honduras (53%), Belice (50%) y Paraguay (49%). Mientras que el promedio regional está en alrededor del 40%.
El informe también da cuenta que en el caso de las mujeres (50,2% del mercado laboral) todavía persiste una fuerte brecha en relación a los varones. Por dar un ejemplo, la tasa de desempleo femenino -de 10,4 por ciento al tercer trimestre- sigue siendo 1,4 veces la de los hombres.
Desde una perspectiva general, el desempleo creció por tercer año consecutivo en Latinoamérica y el Caribe durante 2017 y alcanzó los 26,4 millones de personas.