Redacción Canal Abierto| El 2 de octubre de 2017, Mariana Gomez fue detenida por lesbiana en la estación Constitución.
Esa tarde lluviosa, Mariana estaba con su esposa, Rocío Girat, fumando bajo un techo exterior de la terminal de transporte. Fue entonces que el policía Jonathan Rojo se acercó para exigir que apagaran el cigarrillo. Así lo hizo.
Lamentablemente, la historia no terminó ahí.
Mariana y Rocío fueron increpadas por la policía y obligadas a mostrar el certificado que diera cuenta que estaban casadas: “A cualquier otro matrimonio no le pasa esta situación, se manejaron con total impunidad, Mariana terminó desvanecida en el piso, porque hay un estado que las avala (en referencia a las fuerzas de seguridad)”, explicó Rocío Girat, en diálogo con Canal Abierto.
Mariana fue empujada al piso, donde Jonathan Rojo le pisó el cuello. Luego fue esposada durante tres horas y media en la estación frente a toda la gente. A su esposa le negaron información sobre el lugar donde iban a llevarla y la trataban de “amiga”, incluso luego de haber presentado el acta de matrimonio que llevaba consigo.
Por el momento, Mariana está procesada y se encuentra a la espera del sorteo del tribunal. Desde la familia aguardan que la justicia contemple lo ocurrido, y tenga otra perspectiva. La carátula de la causa es por «desobediencia a la autoridad y lesiones graves». “No mató a nadie ni mandó a nadie al hospital, sólo nos defendimos. No entiendo en qué momento pasamos a ser dos mujeres más peligrosas que los dos policías que estaban ahí con armas. Esperamos que en esta nueva etapa se puedan contemplar otras situaciones y que haya justicia, porque fuimos discriminadas”, manifestó Girat.
En su declaración, el policía Jonathan Rojo expuso que trató de contener y consolar a Rocío, y tildó de violenta a Mariana, en un intento por caracterizar a Girat como una persona débil e impedida para defenderse por sus propios medios. Además de tratarse de un relato falaz -tal como se desprende de los testimonios, la argumentación del oficial revela la mirada patriarcal que subyace al caso, y que intenta poner a las mujeres un escalón por debajo del hombre.
Este jueves 19 a partir de las 18 hs. habrá una conferencia de prensa en la ciudad de Buenos Aires, en Hipólito Yrigoyen 1440. “Necesitamos poder difundir y tener apoyo porque se viene una instancia más dura, que es el juicio oral, y queremos ver la manera de poder revertir esta situación», señaló la jóven.
Además, se convocó a un “twitazo” con el hashtag #ProcesadaPorBesar para este miércoles 18 de abril, de 11 a 14 hs., mediante el cual se busca invitar a toda la sociedad a visibilizar este acto de discriminación.