Redacción Canal Abierto | Tras el descontento manifestado por los trabajadores de la multinacional francesa Carrefour por el acuerdo logrado por la conducción del Sindicato de Empleados de Comercio con la empresa y el Ministerio de Trabajo, éste dictó la conciliación obligatoria por 15 días, en busca de un nuevo acuerdo.
Carrefour había hecho un pedido de procedimiento de crisis que contemplaba unos 3000 despidos. El acuerdo anunciado con bombos y platillos tanto por el gobierno como por el gremio durante el fin de semana, incluía transformar esos despidos en 1000 retiros voluntarios con el pago de «hasta el 150%» y que el estado nacional se hiciera cargo del 50% de los aportes patronales.
El anuncio no encontró consenso en los trabajadores que realizaron un paro de actividades en las sucursales porteñas de la firma, lo que llevó a la cartera conducida por Jorge Triaca a dictar la conciliación obligatoria, deteniendo por 15 días la reestructuración planteada por la patronal.