Redacción Canal Abierto | «Somos de los países del mundo que mas dependemos del financiamiento externo, producto del enorme gasto público que heredamos y que estamos ordenando. Frente a esta situación, y de modo preventivo, quiero anunciar que comenzamos conversaciones con el FMI para habilitar una línea de financiamiento», aseguró el Presidente en un mensaje grabado en Casa Rosada.
Palabras más, palabras menos, y en medio de una nueva corrida del dólar que por estas horas llevó el precio de la divisa a 23,50 pesos, Mauricio Macri no hizo más que confirmar la estrategia Cambiemos para esquivar la crisis: mas endeudamiento.
Con esta decisión, la Argentina vuelve a financiarse con recursos del Fondo Monetario Internacional a 12 años del cancelamiento de la deuda con ese organismo con reservas del Banco Central que, por aquel entonces, fue de u$s 9.500 millones.
La medida se suma al anuncio de la semana pasada de reducción del gasto público en casi un punto del PBI, la suba de las tasas del Banco Central en torno al 40%, la ratificación de la meta inflacionaria del 15% y la venta de US$500 millones de reservas por semana para contener el dólar.
Si bien el Gobierno intenta mostrar todas estas medidas como vías para el freno a la devaluación, la suba del dólar se condice con las recomendaciones del FMI, cuyos asesores aconsejaban en enero pasado una devaluación del 25%, que por entonces significaba una depreciación del dólar hasta los 22 pesos.
«El FMI apoya el programa argentino», lanzó el ministro de Haciendo, Nicolás Dujovne, minutos después de la virtual cadena nacional de Macri. Queda claro que Cambiemos sigue haciendo la tarea, y todo pareciera indicar que el FMI piensa dar el aprobado, sobresaliente.