Redacción Canal Abierto | La crisis sólo es tal cuando se siente en los hogares. Y en julio fueron 6.588 los que se sumaron al desempleo, los que duplican con creces los de junio y engrosan la larga fila de despedidos y suspensiones de 2018, que ya asciende a 32.794 en los primeros siete meses.
La cifra se desprende del último informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) que detalla el impacto de la crisis en términos de suspensiones y despidos. Según estos datos, durante los primeros siete meses hay un promedio de 4.684 despidos y suspensiones mensuales que mayoritariamente pertenecen al rubro servicios e industria, y esta última concentra el 77% de los casos.
“Si se consideran los datos de los primeros siete meses de 2017, los despidos y suspensiones en el mismo período de 2018 superan en 7.296 casos a los del año anterior. Esto representa un incremento de casi 30% en 2018 respecto de 2017”, explica el estudio.
Del total de casos de 2018, 12.532 corresponden a empleo público y 20.262 a empleo privado. En evolución comparativa, el sector público sumó muchos más despidos que en 2017, sobre todo en los primeros dos meses del año. Los siguientes cinco meses es el empleo privado el que pierde más puestos laborales.
Con trabajo también se sufre
Los hogares de la clase trabajadora que no han sufrido aún el desempleo, no son –tampoco- inmunes a la crisis. “El avance de la inflación, que en el acumulado de los últimos 30 meses fue del 110%, y la decisión de frenar los salarios, alejó mes a mes nuestro ingreso del monto necesario para mantener el poder de compra vigente en noviembre de 2015: el poder adquisitivo del salario de junio de 2018 resulta nada menos que un 20,3% inferior al de noviembre de 2015”, sostiene el nuevo informe de ATE-Indec sobre la pérdida salarial.
De acuerdo al relevamiento del organismo, actualizando a precios de junio de 2018 las diferencias de un salario actual respecto al que permitiría mantener el poder adquisitivo de entonces acumula un déficit de $70.957 para un trabajador con categoría D0, cuyo salario bruto actualmente asciende a $17.021 (es decir, más de cuatro meses del sueldo actual). “Éste sería, apenas, el monto necesario para adquirir al día de hoy los bienes y servicios de los cuales un trabajador de la categoría mencionada tuvo que privarse en este período de revolución de la alegría”, detalla el informe.
Además, ATE-Indec releva que al día de hoy un hogar constituido por una pareja con dos hijos menores debería ganar $30.836 para cubrir las necesidades básicas. Este valor se compone de $9.609,9 (canasta alimentaria mínima) y $ 21.226,5 (otros bienes y consumos mínimos).