Redacción Canal Abierto | Mientras el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, intenta defender en Diputados un Presupuesto 2019 cargado de ajuste –sobre todo en el gasto social-, el INDEC dio a conocer los números de la economía de agosto que más impactan en los bolsillos trabajadores: la canasta básica y los datos de empleo. Ambos son, como se esperaba, son malas noticias.
Por un lado, la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que establece la línea según la cual se es o no indigente, aumentó un 25,6% en lo que va del año y un 33,6% en relación al agosto anterior. En tanto, la Canasta Básica Total (CBT), que divide pobres de no pobres, es un 25,1% más cara que en diciembre 2017 y un 36,9% más que en agosto del mismo año. Con respecto a julio, la CBA y la CBT aumentaron 2,8% y 3,6% respectivamente.
En dinero, la cuenta es más cruel: una familia tipo necesita $8.347,57 para no ser indigente. Para no ser pobre, necesita $20.868,93.
La situación se agrava si tenemos en cuenta cuántas son las familias que hoy no se acercan a esos ingresos mensuales porque no tienen trabajo. La tasa de desempleo creció, del segundo al primer trimestre de 2018, 0,5% y llegó al 9,6%, la cifra más alta en doce años. Desde el mismo trimestre de 2017, creció casi 1 punto porcentual (0,9%) según los datos sobre Mercado de Trabajo que dio a conocer el Instituto oficial esta misma tarde.
En términos absolutos, son 56.000 los argentinos que se sumaron a la lista de desempleados del primer al segundo trimestre del año. En relación al segundo trimestre de 2017, son 151.000 desempleados más.
Por su parte, la categoría “ocupados demandantes de empleo” –es decir aquellos que teniendo trabajo están buscando otro-, llegó al 16%, y aumentó 0,7% en un trimestre. En tanto, la subocupación creció en el mismo lapso 1,4%.
La situación laboral es más grave entre los jóvenes. Entre las mujeres de 14 a 29 años, la desocupación trepa al 21,5%, y entre los varones de la misma edad, el desempleo escala al 17,3%.
Geográficamente, las zonas mas afectadas son el Gran Buenos Aires (12,4%), seguido por Rawson-Trelew (11,7%), Santa Rosa (11,1%), Gran Córdoba (10,8%), y Salta (10%).
Estos números amenazan con empeorar en futuras mediciones, ya que no contemplan aún el tercer trimestre, que fue hasta ahora el de la mayor escalada inflacionaria, acompañada por una devaluación feroz, y más recesión y despidos.
Ilustración: Marcelo Spotti