Redacción Canal Abierto| El 2 de agosto, minutos antes del inicio de la jornada escolar, la explosión de una garrafa en la escuela 49 de Moreno se cobró las vidas de Sandra Calamano, vicedirectora de la institución, y Rubén Rodríguez, auxiliar.
A dos meses de la tragedia, la comunidad de Moreno realizó una nueva gran marcha para exigir justicia y respuestas ante la falta de acciones de parte del gobierno para solucionar los grandes problemas de infraestructura que presentan todas las escuelas públicas de la zona, y que podrían derivar en nuevas tragedias.
Directivos, docentes, madres, padres, estudiantes, organizaciones sociales, sindicales y universitarias de todo Moreno concentraron desde las 8.30 en la Plaza Fuentealba, y marcharon hacia el Consejo Escolar del Distrito.
Durante el acto, las familias de Sandra y Rubén tomaron la palabra. Alejandra, hermana de Sandra, agradeció la presencia y el acompañamiento de toda la comunidad. “Venimos a buscar justicia, para que esto no suceda más. Nunca más tiene que pasar que en una escuela tengamos miedo de entrar porque no sabemos si vamos a salir vivos”.
Y agregó: “Esto sucedió por la desidia del Estado, por ese mirar para otro lado, y poner la plata en seguridad y represión, en llevarla hacia afuera, y no ponerla en las escuelas, en los hospitales. Pedimos a la comunidad de Moreno que nos siga apoyando, por justicia para Sandra y Rubén, y sobre todo por la escuela pública”.
Por su parte, Diego Rodríguez, hermano de Rubén, dijo: “La fiscal, después de mucha presión del pueblo de Moreno, nos recibió y se comprometió a trabajar para que las muertes de Sandra y Rubén se esclarezcan, que los responsables se hagan cargo y vayan presos. Hoy, a dos meses, no tenemos ninguna respuesta”.
Las escuelas del partido del noroeste siguen sin clases desde la tragedia, y los maestros se organizaron para dar continuidad pedagógica a sus alumnos, dando tareas en las puertas de los establecimientos.
Las escuelas y centros complementarios que brindan el servicio de comedor también instalaron la modalidad de ollas populares, para poder dar al menos un plato de comida a los niños de una comunidad muy golpeada por el ajuste.
Esto terminó en amenazas y el secuestro de maestras con el mensaje de “Ollas no” y “dejen de hacer política.
Ante todas estas situaciones, Diego Rodríguez, expresó: “Hoy estamos aquí para decirle a la gobernadora Vidal, basta de abandono, basta de olvido. El Morenazo se viene para todos”.