Redacción Canal Abierto | “Degradación del financiamiento y debilitamiento de las políticas nacionales” es el subtítulo de un informe que distintas universidades nacionales y centros de investigación elaboraron en conjunto. Un subtítulo que también funciona a modo de resumen.
Según los datos que surgen de este informe, si el Presupuesto 2019 que ayer obtuvo media sanción en Diputados tras una brutal represión en las calles y un escándalo en la Cámara termina aprobado, la participación de la educación en las partidas presupuestarias bajaría, en un año, “de 7,1% a 5,5%”.
“El presupuesto educativo del Estado nacional en 2019 será, en términos reales, un 17% más bajo que el de 2016 (de 122 mil millones a 101 mil millones). Como en este período, la cantidad de estudiantes en todo el sistema educativo se habrá incrementado en 500 mil, la inversión educativa real por alumno del Estado nacional en el período 2016-2019 habrá descendido más de un 20%”, detalla el estudio elaborado por la Universidad Pedagógica Nacional, la Universidad de Avellaneda, la Universidad Nacional de General Sarmiento, la Universidad Nacional de Quilmes, la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, el Centro Cultural de la Cooperación, y Aula Abierta.
También arroja otros números alarmantes: el presupuesto universitario, según el proyecto que ayer consiguió media sanción, será un 10% más bajo; el Fondo de Educación Técnica será de sólo la mitad (0,10% de los ingresos públicos) de lo que marca la ley 26.058, que establece un 0.20%; el dinero destinado a infraestructura y equipamiento escolar se reducirá de $9.200 millones a $2.600; y las becas quedarán congeladas al igual que los fondos para igualar los sueldos docentes en las provincias.
La partida más afectada es la destinada a ampliación de la jornada escolar, que se reduce a una décima parte. De $307 millones, en 2018, pasará a sólo $34 millones, en 2019. Esto, según el estudio avanza gravemente “hacia el cumplimiento del artículo 28 de la Ley de Educación Nacional 26.206 sobre jornada extendida o completa en primaria”.
Lo curioso es que una de las pocas partidas que exhibe un incremento es la de “evaluaciones educativas”. “Esto se explica por la decisión de realizar costosas evaluaciones estandarizadas censales”, explica el informe, en referencia al Operativo Aprender que Cambiemos impulsó en todo el país.
No son pocos los analistas que presumen que, con un recorte tan grosero en las áreas que posibilitan la mejora en la calidad educativa, estos exámenes tenderán a arrojar resultados cada vez más negativos para la escuela pública. Resultados que empujarán a los padres -que puedan pagarla- a mandar a sus hijos a instituciones privadas.