Por Pablo Bassi (@pablobassi_) | Este viernes Miguel Pichetto, Sergio Massa y Juan Urtubey hubieran estado recorriendo las instalaciones de INVAP en Bariloche, si no fuese por el anuncio del paro aeronáutico frizado por el llamado a conciliación obligatoria. Ese, al menos, fue el argumento que ofrecieron a Canal Abierto en el despacho del senador rionegrino y pre candidato a presidente por Alternativa Argentina: el espacio del PJ no kirchnerista que lideran con Juan Schiaretti.
La actividad en los pagos de Pichetto había sido pensada como antesala de la presentación que el miércoles próximo iban a montar desde Costa Salguero, con proyección nacional. Pero durante las últimas horas, se encargaron de desinflar las expectativas y el mitin pasaría a ser no más que una nueva reunión mesa mediante con los gobernadores alineados: Gustavo Bordet (Entre Ríos), Sergio Casas (La Rioja), Juan Manzur (Tucumán), Rosana Bertone (Tierra del Fuego), Domingo Peppo (Chaco), Hugo Passalacqua (Misiones) y Mariano Arcioni (Chubut).
Los alternativos prestaron mucha atención al fallo que la Corte Suprema dictó el martes pasado. El máximo tribunal desestimó la acción de amparo promovida por la UCR de Santa Cruz para declarar inconstitucional la ley de lemas en esa provincia. Un mecanismo injusto que le permitió a Alicia Kirchner quedarse en 2015 con la gobernación sumando los votos propios y de Daniel Peralta, que separados no alcanzaban a los de Eduardo Costa.
Para el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, el dictamen podría vaticinar la decisión que deberán adoptar los supremos respecto al caso que lo involucra. Weretilneck llegó a la vice gobernación en 2011 y a la gobernación en 2015, cargo que pretende renovar el año que viene. En su entorno leen que esta semana la Corte resolvió, implícitamente, no inmiscuirse en asuntos provinciales.
El mandatario rionegrino lidera hoy Juntos, un partido provincial de relación amigable con Cambiemos. La insuficiente intención de votos de los hombres y mujeres de Pro en la provincia podría llevar a la Casa Rosada a ensayar un acuerdo que le impida al intendente de General Roca, el kirchnerista Martín Soria, desplazarlo.
Ya lo hicieron en 2017, cuando luego de las PASO Weretilneck decidió bajar la lista de diputados nacionales de Juntos. El columnista Carlos Pagni advirtió horas atrás en La Nación que la maniobra podría repetirse con un condimento: la candidatura de Miguel Pichetto a senador nacional por el oficialismo provincial.
¿Será Weretilneck parte del elenco ampliado de Alternativa Argentina el próximo miércoles, junto a otros gobernadores como Sergio Uñac o Gerardo Zamora?
Semanas atrás, Juan Urtubey reconoció la idea de sumar al patagónico: “Pensamos en una construcción lo más amplia posible. No alcanza con el peronismo. Ya está participando el Frente Renovador Misionero (del gobernador Hugo Passalacqua) y, seguramente, pasará con el MPN de Neuquén y Juntos de Río Negro”, declaró en Radio Continental.
No debería desmerecerse ninguna gambeta a la que recurra el macrismo, para equilibrar un frente electoral turbulento. De hecho, ante un escenario que se prevé polarizado, la mayoría de los gobernadores desdoblarán las elecciones. Incluso los aliados. Hasta María Eugenia Vidal mandó a decir que lo analiza, aconsejada por su propia tropa.
Las perspectivas de recuperación económica son desalentadoras. El conflicto social en 2019 se avecina cruento. Esta semana, mientras el ministro de Producción Dante Sica deslizó aumentos salariales del 23% sin cláusula gatillo, la consultora Ecolatina pronosticó para fin del año próximo un dólar devaluado alrededor del 38%.
Con un consumo que continúa en caída, más de 2 millones de nuevos pobres y una inflación estructural que durante los últimos doce meses acumula un 47% constituyéndose en la más alta de los últimos 27 años, Macri y los gobernadores buscan la salida a un laberinto que el 10 de diciembre los encontrará con 116.000 millones de dólares en vencimientos de deuda.
«El 10 de diciembre creo que todos van a querer reconsiderar el acuerdo; Macri también”, elucubró Carlos Melconián, el menos gradualista de los asesores económicos de Cambiemos, en un foro para inversores que esta semana se realizó en Puerto Madero. “Los malos van a querer hablar con el Fondo para reestructurar. Los buenos vamos a tener que hablar con el Fondo para agarrar la manija de la política económica. Si no, va a ser la paz de los cementerios».