Redacción Canal Abierto | Ya son catorce los policías detenidos por la persecución a balazos que terminó en la muerte de cuatro chicos en la localidad bonaerense de Monte. Además, también fue apresado el secretario de Seguridad del municipio, Claudio Martínez, en un avance de la investigación hacia las posibles responsabilidades políticas y el encubrimiento que se intentó en las primeras horas.
Uno de los uniformados involucrados es el teniente primero Héctor Enrique Angel, conocido en el pueblo como “El Pipil”, un personaje señalado de tener vínculos con la venta de drogas.
Su captura, entre otras pistas, empezaría a direccionar la pesquisa hacia la posibilidad de que la violenta persecución se hubiera originado porque los cuatro adolescentes y el adulto que iban en el Fiat 147 habían sido testigos de una maniobra de narcotráfico en la que participaba un grupo de policías.
En conversación con Canal Abierto, el periodista de San Miguel del Monte Alejandro Scioletti, explica cual es la situación actual en el distrio: “Esto nos tiene consternados, nos dejó a todos en un letargo. Todo esto generó este estado tan angustioso, pero sigue la presencia de las marchas con el pedido de justicia y el reclamo del esclarecimiento”.
“Es muy difícil, en un momento nos sentimos muy solitarios y el apoyo de los medios hace que esto tenga la verdadera magnitud de lo que está sucediendo en el país, porque esto sucede día a día en el conurbano y este caso detona una necesidad de justicia popular porque las instituciones no están brindando esa seguridad”, lamenta Scioletti.
La abogada Dorina Bernardez, que representa a la familia de Gonzalo Domínguez, de 14 años, uno de los cuatro jóvenes fallecidos, dijo a Página/12 que en la causa se investigaba la hipótesis de que los chicos podrían haber presenciado “un movimiento policial relacionado con narco menudeo”.
Las autoridades judiciales pidieron a los familiares de Aníbal Suárez, el joven fallecido de 22 años, que no realicen el traslado del cuerpo a Misiones, donde viven sus padres. El fiscal intenta determinar si hubo más de una víctima herida de bala. Esto confirmaría que hubo intención de matar desde el primer momento.
Los policías presos que se negaron a declarar ante el fiscal Damonte son Rubén García, Leonardo Ecilape, Manuel Monreal y Mariano Ibáñez, acusados de “homicidio doblemente agravado por abuso de su función como miembro de fuerzas policiales y por el empleo de armas de fuego”. Están imputados por las muertes de Camila López, Danilo Sansone, Carlos Aníbal Suárez y Gonzalo Domínguez, y por la tentativa de homicidio de Rocío Guagliarello, que sigue internada en grave estado.
Sobre Rocio, Scioletti aclara a este portal: “Está peleando por su vida, sigue muy delicada, está comprometida con una fractura craneana, problemas pulmonares y fracturas muy importantes que hoy están en segundo plano por las lesiones en el cerebro y los pulmones. Pero los familiares informaron que se disminuyeron las dosis de calmantes y la juventud y la buena salud aumentan las esperanzas”.
El conductor del programa “Juntos a la par”, que se emite por la FM Sol local, cuestionó «las idas y venidas de la causa y los peritajes de la policía”, además de confirmar que los familiares recibieron amenazas: “Los padres no pudieron pedir auxilio a la policía porque enseguida descubrieron que había un montón de pruebas -casquillos, balas servidas, y videos de la ejecución policial-, que los involucraban. Fueron a pedir a la intendencia que apoyó la teoría de la policía y por eso se generó una pueblada, y con la intervención de los abogados de CORREPI y la Comisión Por la Memoria empezó a tener un reverso la causa”, asegura Scioletti.
En una entrevista televisiva, la intendenta Sandra Mayol, del Frente Renovador (ex Frente Para la Victoria y ex Unión Pro), tuvo dificultades para explicar porque fue la primera en llegar al hospital local. Hasta ahora la gobernadora María Eugenia Vidal no habló del caso.
Tampoco declararon los policías José Domínguez, Cristian Righero y Juan Gutiérrez por los delitos de encubrimiento agravado y falsedad ideológica de instrumento público.
Foto: Nora Cortiñas consuela a uno de los padres de los jóvenes fallecidos.