Redacción Canal Abierto | Bajo el lema «Viví El Campo», este miércoles arrancó la 133° Exposición Rural de Ganadería, Agricultura e Industria, el histórico evento de la aristocracia agrícola-ganadera argentina nucleada en la Sociedad Rural.
En paralelo, pequeños y medianos productores, familias campesinas y pueblos originarios realizaron un “Alimentazo” en las principales ciudades del país, con epicentro en la Plaza de Mayo. A tan sólo 8 kilómetros de distancia del predio ferial de Palermo, vendieron 30 mil kilos de alimentos básicos, como frutas, verduras, pan, harina o yerba a precios populares.
“Las grandes multinacionales contaminan con agrotóxicos el agua, el aire y nuestros cuerpos, pero ni siquiera producen alimentos para el pueblo, sino soja y maíz para la exportación”, asegura Lucas Tedesco, productor de la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT). “Por eso esta iniciativa y nuestros reclamos, y porque en este momento de crisis y hambre queremos que los productos lleguen a la gente con un precio justo y accesible”.
“Durante los últimos tres fueron numerosos los “verdurazos”, “panazos”, “frutazos”, “bananazos” o ” yerbatazos” que buscaban mostrar la cruda realidad que atraviesan productores y consumidores: sectores que se funden y miles de personas que no llegan a llenar el plato de comida, con alimentos cada vez más caros”, planteaba la convocatoria del Foro Agrario Soberano y Popular, expresión de decenas de organizaciones nacionales de pequeños y medianos campesinos, comunidades de pueblos originarios, cooperativas, grupos ambientales, intelectuales, cátedras de facultades de todo el país, organizaciones gremiales estatales del sector rural.
El Foro tuvo su primer encuentro en abril de este año en el Microestadio de Ferro, donde logró establecer el Primer Programa Agrario con medidas para garantizar que la Argentina alimente de modo sano y soberano a todos sus habitantes y contenga a cientos de miles de productores.
Entre los puntos más salientes del programa figura el camino hacia la Soberanía Alimentaria con la promoción de la agroecología con políticas activas, la limitación de la aplicación de agrotóxicos; el control del comercio exterior por parte del Estado nacional y la promoción de los programas de compra estatal de alimentos de la agricultura familiar; los derechos de exportación segmentados por volúmenes; el acopio estatal de granos, priorizando el consumo interno y la producción industrial; la intervención estatal para impedir la monopolización de las cadenas agroalimentarias, así como la defensa de los derechos de los productores a la tierra y el territorio y al cuidado de los bienes naturales.