Redacción Canal Abierto | Mucho se habló de la cuarentena en los barrios populares, sobre todo de la dificultad de su práctica e impacto. Pero un tema poco tratado es el de las organizaciones que trabajan en los territorios asistiendo de diferentes maneras a las poblaciones que allí viven.
Es por esto que desde la Federación Nacional Territorial (FeNaT) y la CTA Autónoma Capital lanzaron la campaña «El trabajo comunitario es esencial», en el que buscan visibilizar la labor de los miles de militantes que, sin remuneración y exponiéndose a los riesgos que implica la endemia, asisten todos los días en comedores, merenderos y distintos espacios emplazados en los barrios, para aliviar el duro momento a sus familias.
En este sentido, el titular de la FeNaT, Omar Giuliani planteó que «la pandemia lo único que hace es dejar al descubierto lo que sucede en este sistema: hay grandes sectores de nuestra población, barrios enteros, en los que la vida no es digna. Si se plantea como método de preservar la salud meterte en un barrio que no es digno, es inviable».
«Pero quienes hacen que eso sea viable -completa Giuliani a Canal Abierto– son aquellos espacios comunitarios que, a pesar de toda esta situación, le ponen el pecho y están cotidianamente resolviendo, en primer lugar, la cuestión alimentaria. Pero también todo lo que tiene que ver con la contención y el trabajo territorial, solidario, fraterno, en una situación en la que nosotros sí creemos que el aislamiento debe ser físico pero no social. Uno se debe aislar físicamente para preservarse en términos de salud. Lo que no podemos hacer es encerrarnos socialmente».
Y agrega: «Poder llevar adelante la tarea que venimos llevando todos los días es esencial. Nuestros espacios comunitarios son el referente, los y las militantes que están en el barrio. No sólo para construir una olla para que coman un montón de pibes y pibas y familias, sino además son los que intervienen en situaciones de violencia tanto dentro del barrio como con las fuerzas policiales, por ejemplo».
«Por esto creemos que hay que declararlo trabajo esencial Y además hay que pagarlo -sostiene-. Porque además hay que dejar en claro que el trabajo es militante y no hay ningún salario por eso. El Estado debe reconocer el trabajo esencial y, además, debe pagarlo».
En función de las limitaciones que implican cuarentena por el COVID-19, las acciones de la campaña serán desarrolladas mediante redes y audiovisuales. «La idea es que todos los espacios comunitarios puedan empezar a desarrollar este planteo de que somos un trabajo esencial al igual que otras tantas profesiones, que a pesar de la cuarentena siguen en el territorio trabajando», explica Giuliani.
«El trabajo de los espacios comunitarios no es cocinar sino que, en la mayoría de los casos, es poder preservar la vida de nuestros pibes y nuestras pibas ante un montón de situaciones: alimentarias, de violencia y de falta de afecto. Y quienes llevan adelante esta tarea son los espacios comunitarios con sus militantes», concluye.