Redacción Canal Abierto | Todas las encuestas vaticinan una victoria de Joe Biden sobre Donald Trump en los comicios presidenciales de este martes: 54%-42% (CNN/SSRS), 52%-42% (IPSOS/Reuters), 51%-41% (Quinnipiac University) 50%-41% (New York Times/Siena College).
De confirmarse dichas tendencias, tampoco resultarían en un reaseguro del arribo del ex vicepresidente a la Casa Blanca. Ejemplo de ello fueron los comicios de 2016, cuando la ex secretaria de Estado Hillary Clinton se impuso por 48,2% a 46,1% en el voto popular, pero en el Colegio Electoral perdió por 304 a 227.
Cada estado tiene asignado un número de electores que equivale a la suma de las bancas que le corresponden en la Cámara de Representantes, proporcionales a su población, y en el Senado, donde son dos para todos. Este sistema indirecto -similar al que rigió en Argentina hasta 1946, y que reaparecería en 1958, 1983 y 1989- termina volviendo menos menos predecibles los resultados y fragmentando la atención sobre cada uno de los 51 estados.
“Esta elección revela una crisis de legitimidad muy fuerte del sistema norteamericano, algo que queda en evidencia en las múltiples impugnaciones y en la fuerte probabilidad de que el perdedor -sea Biden o Trump- vaya a acusar al otro de fraude. Por eso, creo que hoy el establishment hoy rezando para que que se confirmen las encuestas y gane Biden, pero con contundencia”, explica el investigador y especialista en historia norteamericana Pablo Pozzi.
En esta entrevista con Canal Abierto, el autor de libros como “Luchas sociales en Estados Unidos” (1993) o “La decadencia de Estados Unidos” (2009) historiza la polarización política y las denuncias de fraude en el gigante del norte, advierte sobre la conflictividad social en aumento y traza algunas líneas sobre la geopolítica que se viene.
Hacia afuera
“Gane quien gane, estamos muy equivocados si esperamos un cambio radical en la política hacia América Latina”
“¿Cuál de los dos es mejor para la Argentina y la región? Creo que ambos son peligrosos”
“Muchos analistas creen que sería mejor una victoria de los demócratas porque parecerían mas accesibles frente a un gobierno como el kirchnerista. Yo no estoy seguro de que sea así: la política de George W. Bush para Latinoamérica fue continuada, e incluso profundizada, por Obama en la presidencia y Biden en la vicepresidencia”
“Sí pueden ser notables las diferencias en materia de política exterior respecto a China o la Unión Europea. Trump es una persona cuyo análisis, o más bien el de sus asesores, considera importante la división entre Rusia y China. Respecto del segundo, con una política de agresión permanente que busca limitar su crecimiento; y para el primero, con una estrategia de distensión que no comparte todo el stablishment republicano, sobre todo un sector que se inclina por avanzar en acuerdos multilaterales, por ejemplo, con la Unión Europea”
“Creo que la disputa por la hegemonía global se va a agudizar, en particular porque pese a la pandemia China viene creciendo a alrededor del 5% anual, mientras que Estados Unidos muestra un retroceso de casi del 10%”
“Biden fue vicepresidente de Obama, cuya secretaria de Estado era Hillary Clinton. No podemos ignorar que es un sector del Partido Demócrata involucrado en cuestiones que van desde la Guerra de los Balcanes hasta la desestabilización de Libia, Brasil, Paraguay y Honduras. Todo esto en un proceso de profundización de la especulación financiera de la economía norteamericana, debilitando así toda base productiva”
Hacia adentro
“La de Trump es una política mercadointernista, lo que no necesariamente representa algo bueno. Como decía Winston Churchill: “Inglaterra no tiene principios, tiene intereses”. Trump podría decir lo mismo”
“La trayectoria de Biden en el Congreso se ha caracterizado por sus posiciones de derecha, pro sionista y represora, sin mencionar las múltiples acusaciones de corrupción sobre su persona”
“Los antecedentes de arteriosclerosis y demencia senil de Biden conllevan otra cuestión preocupante, y es que en caso de que le pasara algo la sucesión recaería en Kamala Harris. Como fiscal del Estado de California, Harris dio el visto bueno a una cantidad de normas que afectaron gravemente a la comunidad afroamericana, con leyes que endurecieron por demás las penas para alguien que llevaba un porro, etc. Estamos hablando de una figura muy impopular entre las minorías. De hecho, no es casual que en las primeras de su propio Estado, California, ella sacara sólo el 4% de los votos demócratas”
“Hay una suposición de que si es mujer y negra, entonces es necesariamente buena. ¿Todos se olvidaron de Condoleezza Rice (secretaria de Estado durante la administración de George W. Bush) o de Margaret Tatcher?”
Alta polarización y el fraude como fantasma
“No es la primera vez que una elección norteamericana se vuelve tan polarizada, ni tampoco tampoco es tan excepcional que haya tantas denuncias o sospechas de fraude. Empezando por 1876, cuando la polarización entre republicanos y demócratas terminó en un fraude alevoso. Ni hablemos de la elección de 1932, cuando Franklin Delano Roosevelt y Hubert planteaban dos modelos sumamente distintos. O bien en 1960, cuando la mafia garantizó que Kennedy le ganara a Nixon”
“Sí es cierto que esta elección revela una crisis de legitimidad muy fuerte del sistema norteamericano. Es decir, que la vasta mayoría de la ciudadanía no cree en el establishment político ni en sus propuestas”
“El principal apoyo de Biden es de aquella gente que odia a Trump, y viceversa”
“Los votantes de Sanders se van a dividir en tres partes: una mayoría que se va a quedar en casa, quienes votan por Biden en rechazo a Trump y los que van a votar por el republicano porque consideran que el Demócrata es un partido corrupto que le robó la elección a su candidato”
Quién va a ganar la elección
“Va a depender mucho de cuánta gente vaya a votar: en caso de que la participación presencial sea alta, es probable que el favorecido termine siendo Trump y el resultado sea muy parejo”
“El recuento de los votos por correo va a ser un tema muy complejo porque puede llegar a durar 15 días, lo que implica posibles impugnaciones y denuncias de fraude”
“Por ejemplo, si uno o ambos candidatos se declara ganador a las 4 de la mañana del miércoles, ¿qué pasa con los votos que faltan contar?”
“El establishment hoy está rezando para que la diferencia sea apreciable. En realidad, creo que están rezando para que se confirme lo que vaticinan las encuestas y Biden gane con contundencia”
Conflictividad social
“El nivel de movilización y conflicto social va a continuar, e incluso profundizar. Si pierde Biden, los demócratas se van a volcar a las calles como en 2016 y vamos a tener un año caliente. Si pierde Trump, la derecha -sobre todo, la derecha evangélica- va a hacer exactamente lo mismo”
“Sea Biden o Trump, el perdedor va a acusar al otro de fraude. La crisis social y económica en Norteamérica es muy profunda, con 1 de cada 5 personas cobrando un seguro de desempleo y un retroceso producto del arrastre de la pandemia. ¿Qué van a hacer frente a esto? Intentar invadir China no, porque es una locura. ¿Y Venezuela? Es más que factible, como una forma de unir patrioteramente a la población y justificar aún más el presupuesta militar”
Entrevista: Diego Leonoff (@leonoffdiego)