Redacción Canal Abierto | Las comisiones de Legislación General, Legislación Penal, Mujeres y Diversidad, y de Acción Social y Salud Pública se reunieron esta tarde para debatir la emisión de un dictamen conjunto sobre el proyecto de “Regulación del Acceso a la Interrupción Voluntaria del Embarazo y a la Atención Postaborto” que será tratado desde mañana por la Cámara baja.
Para hacerlo tuvieron tanto en cuenta el proyecto de Poder Ejecutivo como los impulsados por la diputada Victoria Donda y por su par Araceli Ferreyra.
Uno de los puntos álgidos es la inclusión, o no, de la objeción de conciencia como una posibilidad a ser ejercida por los profesionales de la salud que se negasen a realizar un aborto seguro. El fin de incluirla es evitar conflictos con las clínicas y sanatorios muy identificados con credos religiosos, y garantizar así que el proyecto sea aprobado sin modificaciones por ambas Cámaras.
Una de las posibilidades es que se incorpore esa posibilidad siempre y cuando el profesional que la ejerza mantenga su decisión “en todos los ámbitos, público, privado o de la seguridad social, en los que ejerza su profesión”, derive “de buena fe” a la paciente para que sea atendida por otro u otra profesional en forma temporánea y oportuna, y cumpla con el resto de sus deberes profesionales y obligaciones jurídicas.
Asimismo, los establecimientos de salud podrían ejercer la objeción de conciencia siempre y cuando prevean y dispongan la derivación a un efector que sí la realice y se haga cargo de las gestiones y costos de la derivación.
Mañana, Diputados debatirá el dictamen en una sesión que se anticipa maratónica y cuya votación se espera para el viernes. Se requieren 129 votos positivos para aprobar la iniciativa y remitirla al Senado.
La víspera
Por su parte, en las inmediaciones del Congreso las actividades por parte de “la marea verde” que motorizó este proyecto comenzaron desde hoy.
La Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito -que este 2020 cumplió quince años- convocó a una vigilia en los alrededores del recinto y en distintas ciudades del país desde este jueves 10 a las 10. Habrá un escenario central y pantallas sobre Rivadavia y Callao, puestos de hidratación, reparto de tapabocas y alcohol para mantener los protocolos en el marco de la pandemia de COVID-19.
Con el lema “Con la alegría como bandera”, lo mismo ocurrirá en las ciudades bonaerenses de Ayacucho, Azul, Bahía Blanca, Mar del Plata, Necochea, San Nicolás y Villa Gesell. Y también en Bariloche , El Bolsón y Viedma (Río Negro); Córdoba; Formosa; General Pico y Santa Rosa (La Pampa); San Salvador y Quebrada y Puna (Jujuy); Lago Puelo (Chubut); Neuquén; Paraná (Entre Ríos); Rosario y Santa Fe (Santa Fe); Salta; San Rafael (Mendoza); Santiago del Estero; y Tucumán.
Otras organizaciones, como las centrales sindicales, actrices y escritoras, ya se dieron cita este miércoles para apoyar el proyecto.
En tanto, del lado de Entre Ríos, en Plaza Congreso, los militantes antiderechos identificados con el color celeste se reunirán el jueves a partir de las 18.