Canal Abierto Radio | Pasaron las elecciones legislativas en Argentina y la presencia de la derecha y la ultraderecha es un hecho en el Congreso de la Nación, donde el Frente de Todos (FdT) perdió el quórum propio comenzando la segunda etapa del gobierno de Alberto Fernández. Con esta conformación del recinto, ¿Qué tanta injerencia tendrá el oficialismo y posibilidad de gobernar? ¿Qué tipo de alianzas se proyectan? ¿Cuál será el rol de la izquierda en este panorama legislativo?
Si bien aún se espera el escrutinio definitivo de votos que definirá cuántos representantes del partido Avanza Libertad ingresarán al Congreso de la Nación, y si Randazzo tendrá su lugar o no en una banca, desde Canal Abierto Radio nos comunicamos con la Periodista acreditada en el Congreso de la Nación, Amanda Alma, para analizar el panorama político.
«Si bien no hay un cambio radical en la conformación de los bloques por dentro de la Cámara de Diputados, se instituye una nueva conformación en relación ingreso de la derecha, un bloque muy reaccionario que probablemente tengan cuatro o cinco diputados que conducen Javier Milei y José Luis Espert. Eso genera alarmas en el resto de los diputados, sobre todo en el FdT ya que no se ha podido conocer en definitiva qué está pensando al radicalismo, una de las fuerzas democráticas que está dentro de Juntos y la que más se opone en definitiva a este partido», señaló la periodista.
Javier Milei es secundado en el ingreso por la abogada ictoria Villarroel, cercana a los discursos de la dictadura cívico-militar. Alma alertó sobre su presencia y la reciente historio en el Congreso, la discusión del 2×1 y de cárcel común a genocidas. La periodista indicó que si bien «el Congreso de la Nación no avala los discursos genocidas», allí «hubo genocidas acusados directamente de genocidio como Luis Abelardo Patti y Antonio Domingo Bussi (para quien Milei reconoció haber trabajado) e intentaron llevar a hijos de genocidas incluso».
Asimismo, sostuvo que a pesar de ser “un escenario complejo”, cree “que hay una discusión política lo suficientemente profunda en Argentina para deslegitimar esos discursos”. Pero admitió que “la derechización del Congreso es inevitable”.
En este punto, analizó el panorama y las estrategias que se podrían desplegar: “Por más que el FdT intente frenar el avance de la derecha será complejo porque va a requerir de muchas negociaciones con la oposición de Juntos por el Cambio (JxC) que es la principal oposición, y le quedan poco margen porque los que quedan por fuera de JxC que no van a acompañar al gobierno, por ejemplo, son los tres diputados de Córdoba que difícilmente acompañen en algunos proyectos al gobierno nacional para constituir quórum”.
Al mismo tiempo indicó: «Sin duda va a ser una situación compleja porque va a dar cuenta también de una relación difícil que se da entre la ultraderecha y los sectores de derecha y sectores conservadores de JxC pero van a tener capacidad para fraccionar algunos debates, pienso en la ley que busca derogar las indemnizaciones, en una reforma laboral, imagino que ahí no van a lograr consenso de otra fuerzas para juntar 129 e imponer una agenda”.
En cuanto a la injerencia de las bancas del Frente de Izquierda Unidad, manifestó: «El FIT-U generalmente tiene sus propios proyectos, sus propios dictámenes y difícilmente acompaña al oficialismo en los proyectos que presenta porque tiene una mirada muy crítica también sobre el peronismo podríamos decir. Pero si van a ser una buena barrera para estas arremetidas por derecha. Me parece que va a haber una articulación posible en esa línea”, concluyó Alma.