Redacción Canal Abierto | A pesar de los casi dos años de pandemia, de aquellos aplausos de los que ya no se escucha ni el eco, de la cantidad de trabajadoras y trabajadores en la primera línea de atención frente al Covid 19 muertos por contagio de coronavirus, el personal de enfermería sigue siendo uno de los más maltratados por la administración pública porteña.
El gobierno de Larreta y Quiros los excluye de la carrera profesional y los considera empleados administrativos, lo que se traduce en una enorme pérdida salarial y en que estos trabajadores se vean compelidos a realizar extensas jornadas de pluriempleo para sostener a sus familias. “Nosotros cobramos la mitad de lo que deberíamos cobrar por no estar en la carrera que nos corresponde, por esta discriminación”, señala Cristian Acosta, licenciado en Enfermería y referente en la CABA del SITRE (Sindicato de Enfermería) gremio con representación en varias provincias, con afiliados tanto del sector público como del privado.
Con este panorama, este mes todo el personal dependiente del Gobierno de la Ciudad cobró su aguinaldo con una liquidación hasta un 50% menor. “Cuando cobramos el aguinaldo notamos que recibimos casi un 50% de lo que deberíamos haber cobrado. Varios hicimos reclamos administrativos y nos responden que el Gobierno de la Ciudad no contempla un montón de ítems en el cálculo del SAC. En el caso de enfermería no contemplan las horas extras, módulos que de por sí pagan miserablemente, las excluye del cálculo del aguinaldo”, narra Acosta.
Este jueves el SITRE se moviliza a la Legislatura Porteña, concentrando a las 12 horas en Avenida de Mayo y 9 de Julio para reclamar por la correcta liquidación del Salario Anual Complementario, el pase a la carrera profesional, el pago de horas extras, el reconocimiento de Especialidades, de área crítica y de insalubridad.
Por su parte, la Asociación de Licenciados de Enfermería (ALE) convoca el mismo día a las 13 horas en Uspallata al 3100, frente a la Jefatura de Gobierno en Parque Patricios, a realizar una “fogata de la bronca” y convoca al personal de enfermería a llevar fotocopias de sus recibos para quemar “los aguinaldos de miseria”.
Algunas buenas
Luego del acuerdo firmado por ATE y UPCN con el presidente Alberto Fernández por el que los empleados de la administración pública nacional cobrarán un bono de fin de año de $20.000, en reconocimiento de la pérdida salarial de los trabajadores del Estado frente a la inflación, la Ciudad igualó la suma fija no remunerativa, no bonificable, extraordinaria y por única vez que otorgará Nación. Así, los estatales porteños que iban a recibir un bono de $8.000 tendrán una alegría con el cobro del salario de diciembre.
“ATE Nacional, al conseguir los $20.000 empujó la modificación. El gobierno de la Ciudad había cerrado con el Sutecba un bono de $8.000 a cobrarse el 20 de enero”, señala Rodolfo Arrechea, coordinador nacional de Salud de ATE en diálogo con Canal Abierto.
El 30 de noviembre caducaba una gran cantidad de contratos COVID –personal temporario contratado para afrontar la pandemia–. “Frente a la suba de casos y a las presiones de todos los sectores, hasta de los mismos directores de centros de salud y hospitales, esos contratos no se dieron de baja, pero se dejaron abiertos sin fecha límite, van con el termómetro en la mano y si no sirven los descartan”, señala Acosta. “En el ministerio de Hacienda estaban decididos a darlos de baja”.
El referente gremial informó que, por otro lado, se hicieron llamados a concursos para incorporación a planta para 854 cargos.