Canal Abierto Radio | Las empresas de colectivos redujeron en un 50% la frecuencia en el servicio de colectivos del AMBA en reclamo de mayores subsidios al Estado. En este contexto, la Línea 60 despidió empleados organizados sindicalmente dando cuenta de una persecución gremial, por lo que comenzaron las medidas de fuerza en defensa de los trabajadores hasta que el Ministerio de Trabajo dictó una conciliación obligatoria.
“El conflicto comenzó el 19 de mayo cuando me despiden a mí que soy delegado sindical con carnet de la CGT y la empresa responde despidiéndome pero anteriormente ya habían despedido a seis personas más también involucradas con el activismo y de una agrupación interna que tenemos de los compañeros donde nos ayudamos entre nosotros como forma de mantenernos unidos”, relató Carlos Zaragoza, delegado de la línea 60 y uno de los despedidos, en diálogo con Canal Abierto Radio.
Frente a esto, fue que comenzaron las asambleas y manifestaciones contra el accionar de la empresa. “No realizamos ninguna medida antes porque quisimos agotar lo que sea términos legales porque no queremos perjudicar a los trabajadores”, señaló. Y subrayó que “en la línea 60 viajan trabajadores como nosotros y no los queremos perjudicar, pero luego de agotar esas instancias y que la empresa mantenga su posición, tuvimos que salir al paro y ahí dictaron la conciliación obligatoria”, explicó.
En esta línea, informó que si se unen a alguna medida de fuerza son “sancionados como trabajadores” por lo que “están atados de pies y manos” y denunciando que “todas las líneas tienen problemas pero a los compañeros que dicen algo los echan y los delegados no hacen nada al igual que el Ministerio de Trabajo”, lo que le permite a las empresas “dejar a los trabajadores en la calle sin que les pase nada”.
En cuanto a la medida de fuerza que toman las empresas de reducir los servicios en el AMBA en reclamo de más subsidios, Zaragoza manifestó: “Se está extorsionando tanto a los trabajadores y al Estado pidiendo más subsidios cuando el transporte ya cuenta con el subsidio que sale de los descuentos a los trabajadores de sus recibos de sueldo para que la empresa funcione”.
“Por lo general las empresas de transporte trabajan de esta manera: despidiendo personal y pidiendo más subsidio; pero por lo que tengo entendido por unidad de colectivo les dan un millón cuatrocientos mil pesos ($1.400.000) mensuales más el boleto y todas las regalías con el gasoil barato porque son dueños de las carroceras”, indicó calificándolas como “empresas monopólicas”.