Canal Abierto Radio | El proyecto de Presupuesto 2023 presentado por el Ejecutivo Nacional obtuvo media sanción en Diputados y fue girado a la Cámara de Senadores. El mismo, contempla un crecimiento de la economía del 2%, una pauta inflacionaria del 60% y un gasto total de $ 29 billones; además establece que el gasto total educativo no podrá ser inferior al 1,33% del Producto Bruto Interno (PBI).
“Es interesante ver cómo fueron las alianzas y la ruptura que se generó en el seno de Cambiemos”, indicó Alejandro López Mieres, analista económico, en diálogo con Canal Abierto Radio, señalando que “a favor votaron una gran cantidad del Frente de Todos aunque no la totalidad, Provincias Unidas, el Interbloque Federal, Evolución Radical (separado de JxC), la UCR y Encuentro Federal, mientras que el PRO se abstuvo en su conjunto y votó en contra la Coalición Cívica, los partidos de Izquierda y los Libertarios”.
“Este Proyecto no hubiera salido sin las abstenciones del PRO y sin el voto favorable de la UCR y el partido satélite de Cambiemos. En realidad las modificaciones no son menores, son bastante sustanciales y superan el impuesto a las ganancias a los Jueces aunque sea de lo que más se haya hablado”, subrayó.
“En el proyecto de Ley hay una venda final metido por el ejecutivo que se denomina gasto tributario que son aquellas extensiones y ventajas que tienen algunos sectores ya sea por impuesto a las ganancias o sea por cuestiones que tienen que ver con promociones como Tierra del Fuego que alcanza el 2.5 del PBI pero el déficit no puede superar el 2% por lo que el ajuste es de 0,8% que puede llegar a alcanzar al 1%; un número que no es menor”, explicó López Mieres, destacando que “tiene un alcance más político y simbólico que cuantitativo”.
Asimismo, hizo hincapié en un “punto del que no se habló mucho” y es el de “la cláusula gatillo” ya que “el nivel de inflación esperada en 2023 es del orden del 60% pero parece corto respecto a las previsiones. Entonces se terminó concediendo para que se vote el general del proyecto que si se excede al 10% la inflación o los recursos al mes de agosto del año que viene el Ejecutivo tiene que mandar un proyecto al Congreso para redefinir la dirección del gasto” por lo que “no va a poder modificar las retenciones discresionalmente”.
Otro tema que remarcó López Mieres fue la reducción del 15% en la partida para Educación: “Es un presupuesto de ajuste”, recordó asegurando que “no hay una reducción tan importante en ese sentido; la reducción se va a caer fundamentalmente por las transferencias corrientes a las Provincias, cosa que le costó al Gobierno negociar”.
Por otra parte, advirtió que “no figura en este Presupuesto un impuesto a la renta extraordinaria. Hay una especie de capitulación respecto a los ingresos; estamos discutiendo en qué ajustamos pero no estamos discutiendo en cómo amplificar los ingresos y la única manera que tiene esta dinámica de amplificar los ingresos es con más inflación. O sea que es directamente un golpe al bolsillo popular”.
El analista económico, refirió también a la “estructura progresiva que tiene que tener el sistema impositivo” apuntando contra los y las funcionarias que votaron en contra del impuesto a las ganancias a los jueces, “el sector más acomodado de la sociedad”.