Redacción Canal Abierto | Una familia tipo -cuatro miembros- porteña necesitó en mayo percibir ingresos de por lo menos $125.701.89 para no ser considerada en situación de indigencia, $222.601,07 para no quedar comprendida en la pobreza y $342.565,24 para ser catalogada como de clase media, según los últimos datos difundidos por la Dirección General de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires.
Los montos no incluyen el pago de alquiler de vivienda ni de expensas comunes, no consideramos por el organismo para la elaboración de estos índices.
De esa forma, los gastos de la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que marcan el límite de la indigencia, tuvieron el mes pasado un aumento del 4,98, llevando el acumulado de estos doce meses 131,15%. En el caso de la Canasta Básica Total (CBT), que establece el tope de la pobreza, el incremento mensual fue del 6,73%, y su interanual del 123,38.
A primera vista, es evidente la brecha existente entre estas cifras y la del salario mínimo (SMVM), que en junio llegó a los $87.987 producto del acuerdo sellado en marzo por el Ejecutivo, la UIA y la CGT (con el rechazo de la CTA Autónoma y la abstención de la CTA de los Trabajadores).
Al tomar este haber como referencia -de hecho, lo es, ya que los salarios sociales complementarios, como el Potenciar Trabajo, son el 50% de su total-, vemos que el SMVM sólo alcanza para comprar el 40%.
📊En mayo, para no ser pobre por ingresos, una familia de 4 miembros, propietaria de la vivienda, necesitó ingresos por más de $222.601.
❗️Este valor es 6,7% superior al medido para abril.
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— Dirección General de Estadística y Censos – GCBA (@EstadisticaBA) June 12, 2023
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) dará a conocer el miércoles 21 de junio su medición del Índice de Precios al Consumidor y las canastas básicas de mayo. El Gobierno se ilusiona con que el primero -que mide la inflación- se ubique por debajo del duro 8,4% de abril. Sin embargo, no son pocas las consultoras y analistas que hablan de un guarismo cercano al 9%, lo que representaría un duro golpe para el Frente de Todos con miras a la carrera electoral, y en particular para el ministro de Economía Sergio Massa.
En este contexto de fuerte pérdida del poder adquisitivo, todavía no se formalizó la convocatoria a la próxima reunión del Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo, Vital y Móvil. Aún con fecha a confirmar, se estima podría realizarse en las primeras semanas de julio, donde sectores sindicales como la CTA Autónoma volverán a reclamar una recomposición acorde al ritmo inflacionario.
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