Redacción Canal Abierto | El INDEC hizo publicos dos informes que reflejan la perfomance del gobierno de Milei en dos aspectos sensibles: la evolución del PBI y los niveles de actividad y empleo. Y en ninguno de los casos los resultados son positivos.
El primer informe refleja una caída interanual de 5,1% del producto bruto interno y de 2,6% cuando la comparación se hace respecto al último trimestre del mes anterior. En el segundo, las noticias tampoco son alentadoras: la desocupación se ubica en el 7,7%, lo que equivale a 2 puntos por encima del período precedente y 0,8 respecto al mismo trimentrstre de 2023.
Cabe destacar que ambos trabajos corresponden a lo ocurrido durante el primer trimestre de este año. Es decir, que los 90 días computados son fruto de las políticas del gobierno libertariano.
PBI rumbo al subsuelo
Durante el primer trimestre abordado en su integridad por las políticas del gobierno de Milei, el PBI cayó un 5,1% interanual y 2,6% desestacionalizado. Por su parte, el consumo privado se retrotrajo en un 6,7% interanual y 2,6% respecto al período anterior. Llamativamente, viniendo de un gobierno que se jacta de priorizar al sector privado por sobre el público, el desplome del consumo en este sector se vio atenuado: 5% interanual y 0,8 desestacionalizado.
Otro rubro en el que se ve una pronunciada caída es el de la inversión, en el que el retroceso alcanza el 23,4% respecto al mismo tramo de 2023 y 12,6% si se compara con el periodo anterior.
El comercio exterior refleja un incremento de las exportaciones y un desplome de las importaciones. Las primeras tienen un incremento del 26,1% interanual y 11,1% desetacionalizadas y las segundas caidas de 20,1% y 12,1% respectivamente.
En el análisis por sector, son pocos los rubros que muestran una mejora respecto del año anterior. El que aporta la mayor diferencia es el que tiene que ver con la agroganaderia, que sube un 10% la actividad respecto al año anterior, signado por la mayor sequía de la que se tenga registro en le historia argentina.
Le sigue la explotación de minas y canteras, con 8% de crecimiento. El 3,2% de pesca completa el podio con actividades con entre escaso y nulo valor agregado y fuerte componente extractivo. Tres actividades más registran alzas: son Enseñaza (1,6%), Servicios sociales y de salud (1,3%) y el sector público (0,8).
El ejército de los núeros en rojo lo encabeza, para sorpresa de nadie, la construcción, cuya retracción alcanza los 19,7 puntos. Le siguen la industria manufacturera (-13,7%), la intermediación financiera (-13%), comercio (-8,7%), electricidad, gas y agua (-2,2%), actividades culturales y sociales (-1,9%), servicios del hogar (-1,9%), hoteles y restaurants (-1,7%), actividades inmobiliarias (-1,6%) y transporte y comunicaciones (-1,3%).
Desocupación, a la azotea
El otro informe que también refleja datos atribuibles en su totalidad a los efectos de las políticas de Milei es el capítulo de Actividad y Empleo de la Encuesta Permanente de Hogares.
De este estudio se desprende que la desocupación alcanza hoy al 7,7% de la población económicamente activa. Estos números implican una suba de 2% respecto del trimestre anterior y 0,9% desestacionalizada.
El reporte refelja otros males de la época. Por un lado, la subocupación, que llega a 10,2% -un retroceso de 0,3% respecto al trimestre anterior, pero un aumento de 1,2% interanual. Por otro, personas que aún teniendo un empleo, buscan otro para poder llegar a fin de mes. Ese universo trepa al 16%, un 0,5% encima del último trimestre de 2023 y 1,2% respecto del mismo períodos de ese año.
En el desagregado por género y edad, el impacto es más fuerte entre mujeres (8,4%) que en hombres (7%). En ambos casos, dentro de cada género, el sector etario más afectado es el de jóvenes de hasta 29 años (17,3% en mujeres y 14,1% en varones).
En cuanto a las referencias geográficas, las regiones Pampeana y Gran Buenos Aires registraron las mayores tasas de actividad (48,5%); Cuyo, la mayor tasa de empleo (45,6%); y Gran Buenos Aires, el mayor nivel de desempleo (9%).