Redacción Canal Abierto | En el Día de la independencia, la Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales para el Desarrollo Argentino (ENAC) difundió números devastadores: desde que asumió Javier Milei, se cerraron 10.000 pequeñas y medianas empresas.
“La ENAC denuncia públicamente que en 6 meses Javier Milei y Luis Caputo destruyeron 10.000 empresas pymes en la Argentina”, sostiene el comunicado.
Los datos que arroja la ENAC se basan en los números publicados por el INDEC, la Secretaría de trabajo de la Nación –que estima 69.000 empleos menos–, el Banco Central –que acusa una caída de 350.000 cuentas sueldo– y la AFIP.
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“Advertimos al Congreso de la Nación y al Gobierno Nacional que éste no era el camino para salir de los problemas de la Argentina. No escucharon y ahora el daño está hecho. Este experimento libertario está destruyendo 50 pymes por día en la Argentina sin plan ni rumbo económico que genere certidumbre sobre el clima de negocios para poder desarrollar nuestra actividad económica en paz”, aseguran desde la organización.
Luego agregan: “La recesión ordenada por el presidente Milei y ejecutada por el ministro endeudador de Economía, Luis Caputo, con rigurosidad ha pasado de recibir un país que creaba 8.600 empresas por año a uno que destruye su equivalente en la mitad de tiempo. Destruir pymes es destruir la base del patrimonio nacional para volver a ser colonia extranjera”.
Falta de ventas
En la misma línea, la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME) publicó un informe especial sobre las ventas minoristas pyme, igual de desolador.
Según el organismo, éstas retrocedieron 21,9% anual en junio, a precios constantes, y acumulan una caída de 17,2% en el primer semestre del año. En la comparación mensual desestacionalizada, repuntaron 1,2%.
La desaceleración de la inflación, que el Gobierno decidió tomar como su primera batalla, no ha mejorado el panorama. “Si bien los comercios están más aliviados por la mayor estabilidad en las listas que reciben, la dinámica de las ventas que no despuntan preocupa. No hubo ningún rubro que haya escapado a la tendencia general”, destacan en la CAME. Y agregan que los comerciantes mostraron preocupación “por los montos que se están pagando por el consumo de energía en un contexto de tan baja demanda”.
Asimismo, subrayaron que el Día del Padre ayudó a repuntar los productos vinculados a esa fecha, “pero esto sólo se dio en los días previos”. “No hubo venta posterior, como habitualmente sucede”, agregaron. También relevaron que la gente buscó comprar en cuotas.
Sobre los comercios pymes, la Cámara que los nuclea relevó que la medida que más esperan es la reducción de impuestos (40,7%), seguida por el estímulo a la demanda interna (17%). “Esto sugiere que, en el contexto actual, los comerciantes priorizan las intervenciones directas que pueden mejorar su competitividad y eficiencia operativa sobre opciones de financiamiento más favorables”.
En lo que refiere a los principales obstáculos que enfrentan son la falta de ventas (57,6%) y los altos costos de producción y logística (23,4%).
En junio, los siete rubros relevados que incluyen Alimentos y bebidas (-26,6%); Bazar, decoración, textiles para el hogar y muebles (-24,7%); Calzado y marroquinería (-20,7%); Ferretería, materiales eléctricos y materiales de la construcción (-23,3%), y Textil e indumentaria (-0.9%)– registraron caídas interanuales en sus ventas, aunque las mayores retracciones anuales se detectaron en Perfumerías (-42%) y Farmacias (-32,8%).