Redacción Canal Abierto | Trabajadores del desmantelado Instituto Nacional de Agricultura Familiar de la Nación realizarán una concentración mañana a las 10 de la mañana en el ingreso al Predio de la Rural en Palermo, donde se desarrolla la tradicional exposición de la patronal agraria.
En el marco de la actividad se realizará una radio abierta de la que participarán los trabajadores despedidos del Instituto Nacional de Agricultura Familiar de la Nación y los productores comercializarán verduras y hortalizas a precios justos.
Bajo la consigna «El campo no son sólo negocios, también es soberanía alimentaria«, de la convocatoria participarán trabajadores agropecuarios, organizaciones campesinas, indígenas, gremiales, sociales y de derechos humanos. Entre las convocantes se encuentran la CTA Autónoma, ATE Nacional, la Federación de Trabajadores Agrarios de la República Argentina (FeTARA), la UTT, Somos Barrios de Pie, SERPAJ, la Federación Rural para la Producción y el Arraigo.
Consultado acerca de la elección del escenario, Ernesto Ojeda, Secretario General de FeTARA, explicó en diálogo con Canal Abierto que, si bien el reclamo es hacia el gobierno nacional, “así como para la lucha del pueblo peronista la Plaza de Mayo es un lugar en el que se marcan muchas decisiones en la vida de los pueblos, también la Rural es un lugar de representación histórica simbólica de los ricos y de los poderosos que a lo largo de los últimos años han concentrado muchísima riqueza y es la representación de ese grupo selecto agroexportador ”
“Así que, con un Estado cooptado por esos grupos y en un lugar simbólico de esos grupos, los ganadores de estos tiempos despiden de los lugares de trabajo a compañeros que cumplen un rol muy importante en la producción agroalimentaria, en la actividad campesina indígena y en el ámbito de la ruralidad como una ayuda del Estado para mejorar, desarrollar y generar mejores condiciones de vida para la ruralidad. Entonces en ese lugar es donde nos vamos a manifestar”.
“Nosotros somos representantes de los trabajadores rurales que somos víctimas de maltrato laboral y en el mismo ámbito de la ruralidad muchos trabajadores que desempeñan y trabajaron durante muchos años en el Estado hoy son víctimas de esta política de desmantelamiento del Estado. Lo único que estamos haciendo es solidarizarnos con nuestros compañeros y trabajadores que son víctimas de este desmantelamiento y del desguace que están haciendo y de esta batalla contra los pobres”, señaló el dirigente.
Ojeda evaluó que las corporaciones “se han propuesto hacer mucho daño y cuando en la ruralidad, en los sectores de nuestro interior profundo, en lugares de trabajo rural vos le sacás herramientas, no solamente se perjudica al trabajador que se despide, si no que todas las ayudas que llegan a esos lugares para poder generar alimentos, para poder criar animales, para poder desarrollarse mejor, ya no están. Lo que hacen es quitarte la herramienta del Estado que asiste a los sectores más atrasados en el reparto de la riqueza en Argentina”.
Ojeda se refirió a la continuidad de la ruralidad aún estas dificultados y sostuvo que “nuestro pueblo tiene una resistencia, recursos de conocimientos y un aguante muy grande. Eso lo sabemos. Y también sabemos que esta etapa la vamos a superar. A través de los diferentes momentos difíciles que nos tocó vivir, nuestro pueblo y la clase trabajadora acumulan dolor y bronca. Y eso se va manifestando de una u otra manera y va encontrando su cauce para recuperar su dignidad, recuperar sus ingresos, recuperar su cauce y su organización. Y recuperar la patria, porque este es lo que está pasando”.
“Nos estamos arreglando como podemos: con la solidaridad con la ayuda entre nosotros. Los trabajadores rurales, sobre todo el trabajador golondrina, el trabajador cíclico, más allá de los abusos que ya es casi un hábito de los patrones, están sufriendo un gran desamparo en estos tiempos. Y el trabajador campesino que vive de sus ingresos y de su propio esfuerzo, subsiste como puede con la solidaridad y subsiste con sus capacidades y con sus conocimientos”, lamentó.
Y concluyó: “el Estado se retiró de la ayuda alimentaria, retiró el aporte de conocimiento técnico y profesional con el despido de nuestros compañeros y se retiró con herramientas y equipamiento para producir de mejor manera y sustentar de una vida digna. Todo este gran retiro es una política preestablecida de sufrimiento para nuestro pueblo”.