Redacción Canal Abierto | Ayer, la vicepresidenta sacudió la arena política al encabezar el acto por el Día Internacional de la Conmemoración a las Víctimas del Terrorismo en el Senado, donde expuso virulentamente y a cielo abierto su objetivo central de gestión y su agenda principal, con frases como “reabriremos todas las causas de víctimas del terrorismo” o “los Montoneros tienen que estar presos respondiendo por ensangrentar nuestra Nación”.
Si bien no dio detalles sobre cómo impulsarán esas causas en los tribunales, blanqueó que “ésta ha sido la lucha más importante de mi vida”.
Según la titular de la Cámara alta, tiene que ser “la justicia la que haga lo que debió hacer hace más de 20 años”. En esa línea, destacó: “Sólo con los asesinos en las cárceles podremos, en la unidad y el deber cumplidos, poner a la Argentina de pie”.
Los dichos se sumaron a las explosiones que sigue generando la visita de los diputados de La Libertad Avanza a los genocidas presos en el penal de Ezeiza
Hoy, el Centro de Estudios Legales y Sociales, un organismo de derechos humanos señero en la lucha por la verdad y la justicia en nuestro país, protagonista central del impulso a las causas en los tribunales y querellante en muchos juicios, explicó simple, breve y sencillamente porque es imposible que la funcionaria pueda cumplir su sueño.
“El Poder Ejecutivo y el Legislativo no pueden abrir ni reabrir causas judiciales”, comenzaron aclarando.
Además, detallaron que “Los delitos cometidos por las organizaciones armadas que no fueron juzgados en su momento, no pueden serlo ahora porque están prescriptos”.
“Los únicos delitos que no prescriben son los de lesa humanidad o contra la humanidad -continúan-. Crímenes de tal magnitud que la humanidad decidió exhibirlos, juzgarlos y no repetirlos, como los del nazismo o de la última dictadura”.
“Son delitos de lesa humanidad cuando se cometen como parte de un ataque generalizado o sistemático a la población civil por parte de un Estado o con acuerdo estatal o de organizaciones que tengan control territorial y funcionen como un Estado”, subraya el hilo de X.
“Cuando se planteó que las acciones de las organizaciones fueran imprescriptibles, los tribunales dijeron que no porque no tienen estas características. Esta jurisprudencia es nacional e internacional”, sintetizan.
Por otra parte, revelaron que “en este momento hay algunas pocas causas judiciales abiertas que los tribunales deben resolver”.
“El mensaje de la vicepresidenta es político”, concluye el CELS.
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