Redacción Canal Abierto* | El martes por la noche, mientras millones de jubilados cenaban lo que tenían a mano o calculaban hasta qué día del mes les alcanza la medicación, la quinta de Olivos era escenario de un evento tan reducido como particular: el asado con que Javier Milei agasajó a los “87 héores” que votaron contra la actualización previsional en la última sesión de la Cámara de Diputados.
Dentro del selecto grupo legislativo destacan quienes primero alzaron sus manos para la aprobación de la ley y luego prestaron su voto o se abstuvieron para ratificar el veto presidencial.
Adelante radicales
Quien se llevó toda la atención fue el tucumano Mariano Campero, abogado proveniente de una familia de estirpe radical. Fue concejal de Yerba Buena, una localidad residencial del Gran San Miguel de Tucumán donde suelen radicarse los mandatarios provinciales al asumir la gobernación.
Como parte de una nueva generación boina blanca, llegó a la intendencia de este distrito en 2015 y reeligió en 2019. Si bien tuvo un primer mandato accidentado y plagado de rispideces con el Concejo Deliberante, Campero supo fogonearse y adquirir más carácter en su proceder político.
Tras dos períodos en el municipio, formó una línea interna en la UCR y dentro del esquema de Juntos por el Cambio, incorporando a sus listas a referentes del PRO con los que entabló muy buena relación.
El promotor de este esquema fue Campero, sin embargo, quien quedó al frente fue Roberto Sánchez, un productor de papas y ex corredor de rally que por ese entonces se desempeñaba como intendente de Concepción.
Aún sus peores detractores le reconocen la capacidad de tomar riesgos en sus decisiones. La última fue la creación Cambia Tucumán, sello propio con el que aspira a disputar la gobernación en 2027 sin tener que negociar otros sectores del partido centenario.
Cuando el año pasado Juntos por el Cambio definió la interna presidencial entre Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, el tucumano se anotó en la escudería de la ministra de Seguridad. La jugada llamó la atención, ya que la candidata tenía otros vínculos en la provincia: por ejemplo, Germán Alfaro, quien terminó acompañando a Sánchez (el delfín de Campero), y quien finalmente absorbió el costo de la derrota provincial frente a Osvaldo Jaldo.
Tras la derrota de Bullrich en las elecciones generales de octubre pasado y su posterior alianza con Milei, Campero pasó a colaborar con la campaña de La Libertad Avanza poniendo a disposición su estructura para la fiscalización en el ballotage. Fue así que la fuerza triunfadora pudo medirse de igual a igual con el peronismo, que cuenta con un despliegue territorial más que importante. En el jardín de la República, Milei sacó el 51,98% de los votos frente a poco más de 48% de Sergio Massa.
Ya instalado en su banca de la Cámara de Diputados, Campero mantuvo reuniones con Fuerza Republicana, el partido fundado por el genocida Antonio Bussi y que heredó su hijo Ricardo. El objetivo del radical era propiciar un acercamiento entre esta fuerza que reporta al armado de La Libertad Avanza y Juntos Por el Cambio.
Este acercamiento generó resquemor en otros sectores de la UCR que se identifican con la defensa de los derechos humanos y no se sienten cómodos con un espacio político cuyo referente no ha hecho otra cosa que denostar al partido fundado por Leandro N. Alem.
Conocida la suspensión de la afiliación de los diputados que votaron contra los jubilados por la Mesa Directiva de la Convención Nacional de la UCR , Campero tuiteó: “pocas veces en mi vida actué con tanta convicción, como cuando decidí blindar el equilibrio fiscal de este Gobierno”.
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Su correligionario Martín Arjol tuvo aspiraciones a la gobernación de Misiones en 2023, pero fue batido por Hugo Passalaqua. Tras el triunfo de Milei en el ballotage, hizo declaraciones contradictorias, aunque amigables al nuevo gobierno: por un lado, afirmó que “la posición que tenemos que tomar es en la que nos puso la gente, como oposición”; luego aclaró que “no nos podemos oponer a algo que planteamos en la campaña como una modernización del sistema laboral, buscar el equilibrio fiscal, una reinserción plena en el mundo, una reforma y una discusión profunda del Estado que queremos”.
Su gobernación frustrada no lo devolvió al llano, ya que retornó a la banca de la Cámara Baja a la que accedió en 2021 y deberá renovar el próximo año.
El vocal del Comité Provincial de la UCR, Alejandro Chini, presentó en las últimas horas una nota solicitando una fuerte medida contra Arjol.
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Otro boina blanca cuyo futuro político deberá revalidar en 2025 es el neuquino Pablo Cervi, quien también quiso disputar la gobernación de su provincia, pero ni se asomó a la competencia real al sacar sólo el 3,75%.
Referenciado en la figura de Martín Lousteau, compitió con la boleta de Juntos por el Cambio, aunque era un nombre de fantasía ya que se trataba sólo de la UCR, Coalición Cívica y el Encuentro Federal de Miguel Angel Pichetto. El grueso del PRO tuvo mejor olfato y optó por Rolando Figueroa, quien terminó imponiendose.
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Luis Albino Picat es un reconocido productor porcino de Jesús Maria, donde su familia posee el establecimiento La Quimera, además de poseer el frigorífico de cerdos Qualitá. Con un peso importante en la filial local de la Sociedad Rural Argentina, tuvo un rol preponderante durante el conflicto por la 125, encabezó el corte de la ruta 9, uno de los más aguerridos de la provincia mediterránea. Esto lo llevó a presidir esa filial entre 2016 y 2018.
En 2019 dio un paso más y con la boleta de Juntos por el Cambio fue elegido intendente de Jesús María.
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El más nuevo de los diputados del bloque radical que convalidaron el veto es el correntino José Federico Tournier. Asumido el 14 de agosto pasado, no tuvo que esperar ni un mes en hacer méritos para ser incluido en la nómina de los héroes por el presidente Milei. Es el único al que no se le puede denominar como panqueque, ya que no participó de la primera votación, en junio pasado.
Tampoco tiene una raigambre radical histórica, ya que su historia está vinculada al Partido Liberal, del que se fue para dar forma al Encuentro Liberal de Corrientes (ELI) con el que finalmente selló el acuerdo con el radicalismo.
Innovación Federal también merece su asado
La UCR no fue el único espacio político que cambió sus postura entre ambas votaciones, permitiendo que los jubilados no vieran el irrisorio aumento que planteaba el proyecto presentado en junio.
Pero, a diferencia de sus colegas radicales, los legisladores de Innovación Federal optaron por la abstención en vez de por el rechazo al veto. El bloque lo componen los legisladores que responden a los gobernadores Alberto Weretilnek de Río negro, Hugo Passalacqua de Misiones y Gustavo Sáenz de Salta. Con su abstención, este bloque aportó siete votos a la sobrevida del veto presidencial a la movilidad jubilatoria por la que habían votado a favor.
El grueso de los que tomaron esta determinación son oriundos de la provincia de Misiones. Alberto Arrúa es el secretario general del PJ provincial y es un delfín de Carlos Rovira. Sectores del peronismo local lo acusan de haber cooptado el sello partidario para el Frente Renovador por la Concordia y esta votación puede llegar a ser el detonante para que finalmente se defina su expulsión.
Ya había tenido cortocircuitos con sus compañeros tras votar en contra de establecer algún tipo de sanción contra los diputados y diputadas de La Libertad Avanza que visitaron a genocidas presos en el penal de Marcos Paz.
Martín Vancsick es un ex golfista profesional con campeonatos internacionales en su haber que debutó en política en 2021, cuando fue electo concajal de POsadas, cargo al que renunció al entrar a la cámara baja.
Durante su gestión de concejal no tuvo mayor trascendencia. Tampoco a ningún conocedor de la política misionera le llamó la atención que haya sido elegido candidato a diputado nacional por el oficialismo. Fuentes consultadas para esta nota señalaron que se trata de una constante en los últimos periodos que el conductor del espacio, Carlos Rovira, elija nombres que solamente responden a su conducción y carecen de volumen propio, para que le deban y agradecen solo a él las nominaciones.
Yamila Ruiz se define como una “hija de la Renovación”. Fue diputada provincial desde 2019 a 2023. Fue directora de Planificación y Gestión Estratégica del Sistema Provincial de Teleducación y Desarrollo (Sipted), donde sigue teniendo fuerte incidencia.
De profesión abogada y escribana, es una de las “innovaciones” del Frente Renovador en Misiones, sin casi trayectoria político partidaria accedió a la banca de diputada en Misiones en el 2019. Los cuatro años que estuvo en esa banca fue intrascendente.
“En primer lugar quiero agradecer al conductor Carlos Rovira, por permitirnos a los jóvenes participar y exponer nuestras ideas y que se puedan concretar. Permitir esta apertura de los que no veníamos de la política y hoy me siento nativa renovadora, fue el partido político que me abrazó y soy su hija”, afirmó en conferencia de prensa cuando se conoció su candidatura.
Ya en la campaña presidencial del año pasado, abrazó la boleta de Unión por la Patria al afirmar que “hay candidatos a presidente con visiones diferentes, incluso diría que son un antítesis, por un lado tenemos la figura de Milei que viene con la dolarización, eliminar la educación pública, la salud pública, el CONICET e incluso con la venta libre de órganos. Por otro lado tenemos a Sergio Massa, con una propuesta muy sólida que invita a esta Unión por la Patria para poder defender y salir adelante con algo que viene desarrollando la provincia, que es la economía de conocimiento, esta propuesta que viene liderando Misiones él lo toma como ejemplo y vuelca en sus propias propuestas a nivel país, eso habla del federalismo”.
Y afirmó que “se propone una igualdad de género en cuanto a la mujer y hombre trabajando a la par por políticas públicas de calidad y sobre todo defendiendo los intereses del pueblo misionero, Innovación Federal acompaña Unión por la Patria porque Sergio Massa es una persona ya hizo cosas por Misiones que dan fe a su intención de trabajar en equipo”.
Agustín Domingo es diputado de Juntos Somos Río Negro (JSRN), el partido rionegrino del gobernador Weretilneck. Lo insólito del caso es que, en su intervención, Domingo aseguró que la fórmula era fiscalmente viable y que su voto debía leerse como un disciplinamiento político. “No vamos a convalidar el veto del presidente, pero tampoco vamos a desafiarlo”, dijo.
La retórica confrontativa de JSRN fue atenuándose desde la cruzada de verano de los gobernadores patagónicos contra los recortes de fondos hasta el silencio inofensivo. Pasó de votar contra el Decreto 70/23 en Senadores a votar a favor de la Ley Bases a cambio –tal vez- de la elección de Punta Colorada como localidad de instalación de la planta de GNL de YPF y Petronas y de otras retribuciones difundidas por el gobierno provincial, pero hasta ahora no confirmadas.
La salteña Pamela Caletti Integró el gobierno de Juan Manuel Urtubey como ministra de Justicia y Fiscal de Estado. Es graduada en la Facultad de Derecho de la UCA Salta con postgrados en la Universidad Austral. Al igual que otros funcionarios, la relación con Urtubey llega por padre del gobernador.
A Calletti no le pareció extraña la amenaza de Milei y todo su equipo, y en sentido recordó que el “famoso equilibrio fiscal que festejan” se debe en realidad a un “ajuste feroz” que sufrió “más de la tercera parte de los jubilados y pensionados”.
Durante el caso de “Juana” -nombre ficticio asignado a una nena wihci que quedó embarazada producto de una violación y no se le permitió practicarse un aborto-, Calleti responsabilizó a la familia aduciendo “cuestiones culturales”. “Estamos ante una irresponsabilidad de los padres de la niña”.
También culpó a la víctima en el caso del femicidio de Andrea Neri, la joven asesinada en 2017 por Gabriel «Chirete» Herrera en el interior del Servicio Penitenciario. “La víctima conoció al asesino dentro de la unidad carcelaria mientras acudía a visitar a un familiar y pese haber sido advertida sobre la peligrosidad del mismo, de igual manera decidió comenzar una relación con él”, declaró en ese momento.
Tras la salida de Urtubey, Saenz la nombró como asesora jurídica del gobierno salteño. Tras el escándalo del vacunatorio VIP, se difundió su nombre entre las que recibieron la vacuna contra el COVID 19 en Salta, a pesar de tener en ese entonces 41 años y no presentar comorbilidades conocidas. El entonces ministro de Salud provincial Juan José Esteban publicó el listado y justificó algunos casos como el de ella aduciendo que se trataba de “vacunas estratégicas”.
* Este artículo se hizo con el aporte de Pablo Bassi, colaborador de Canal Abierto en Río Negro e integrante del Colectivo Al Margen; Alicia Rivas, periodista en FM Universidad 98.7 de la Universidad Nacional de Misiones (UNaM); Gabriela Baigorrí, redactora de política en La Gaceta de Tucumán y Bárbara Arias, periodista e integrante de CISPREN de Córdoba.