Redacción Canal Abierto | Este lunes, el Gobierno informó que el nuevo ministro de Defensa será el general Carlos Presti, actual comandante del Ejército y el primer militar en ocupar ese cargo desde el final de la dictadura.
En un comunicado, la Oficina del Presidente (OPRA) señaló que “el actual Jefe del Estado Mayor General del Ejército, el Teniente General Carlos Alberto Presti, dejará su cargo para asumir como el nuevo Ministro de Defensa”.
Y añadió: “Por primera vez desde el regreso de la democracia, una persona con intachable carrera militar que ha llegado al más alto rango en su escalafón estará al frente del Ministerio que está encargado de la defensa nacional y de las Fuerzas Armadas, inaugurando una tradición que esperamos que la dirigencia política continúe de aquí en adelante y dando por finalizado la demonización de nuestros oficiales, suboficiales y soldados”.
Inmediatamente, organismos de derechos humanos criticaron duramente la designación.
La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, sostuvo que el nombramiento constituye una “provocación” del Gobierno.
“Esto es iniciar una situación de violencia en la sociedad, cuando ya sabemos la vida que ha tenido la Argentina con los golpes de Estado, con las dictaduras y con todo lo que hemos sufrido”, afirmó en diálogo con radio Splendid.
La referenta aseguró que el Gobierno “está mortificando al país con ideas extrañas y tenemos la obligación de impedírselo”.
“El que tiene vocación militar que esté en esa vocación y que cumpla con la obligación de defender y defendernos, pero las políticas de Estado las manejan los civiles. Estos son inventos que destruyen la identidad. Van cambiando lo que ya es historia para hacer una historia nueva que no sirve para nada o es peligrosa”, sintetizó la titular de Abuelas.
Por su parte, H.I.J.O.S. Capital explicó: “Su padre Roque Carlos Presti estuvo acusado por delitos de lesa humanidad cometidos por el terrorismo de Estado”.
“Durante la dictadura genocida Roque Carlos Presti estuvo al frente del Regimiento de Infantería 7 en La Plata, a cargo la represión en el área 113. Bajo esa órbita funcionaron los Centros Clandestinos La Cacha, Pozo de Arana y la Comisaría 5ª, entre otros”.
“Murió impune, acusado de secuestros, desapariciones y torturas a 44 víctimas de delitos de lesa humanidad”, volvieron a denunciar.
“Entre los casos, está el ataque a la casa de Teruggi- Mariani, tras el cual sigue desaparecida Clara Anahí Mariani-Teruggi, quien tenía 3 meses de edad cuando cometieron el operativo represivo del que Presti está acusado de haber sido parte”, explicó HIJOS una vez más, antes de finalizar su comunicado con un nuevo llamado de atención:
“Cada vez más familiares de genocidas integran el gobierno de Milei y Villarruel. El silencio es un pacto con la impunidad”.
La organización insiste habitualmente en que nadie es responsable por los actos de sus padres o familiares, pero que el silencio y la falta de repudio público aportan a perpetuar la impunidad.
Myriam Bregman, que además de dirigente política del PTS es abogada con dilatada trayectoria en juicios de lesa humanidad e integrante del CEPRODH (Centro de Profesionales para los Derechos Humanos), también hizo un posteo en ese sentido, en el que se pregunta si ¿PRESTI SABE DÓNDE ESTÁ CLARA ANAHÍ MARIANI?
“Es una verdadera provocación y una ofensa directa, ya que Presti jamás repudió los crímenes de lesa humanidad que cometió su padre, un genocida que actuó en la zona de La Plata”, comienza la publicación.
“Pero hay algo más agrega-. La designación parece ser otra expresión de la subordinación vasalla con Estados Unidos. Hace unos días Donald Trump dio un fuerte mensaje autoritario en una reunión convocada por su secretario de Defensa, Pete Hegseth, con los principales 800 generales y cuadros militares. Trump les planteó como tarea prioritaria el combate contra “el enemigo interno” y usar las ciudades norteamericanas como campo de entrenamiento para guerras imperialistas”.
“Luego, Milei aprovecha que Petri deja el Ministerio para girar en el mismo sentido. No parece casualidad, la construcción del enemigo interno como doctrina baja, otra vez, desde el norte. Algunos señalan las relaciones que tiene el propio Carlos Presti con Estados Unidos” señaló, para luego recalcar:
“El padre del nuevo ministro, Roque Presti, fue jefe del Regimiento de Infantería Mecanizada 7 de La Plata, que tuvo a su cargo el Área 113. Fue uno de los responsables del operativo donde asesinaron a Diana Teruggi y a otros militantes en noviembre de 1976 en la casa ubicada en la calle 30, entre 55 y 56. Allí fue secuestrada y continúa apropiada hasta el día de hoy, Clara Anahí, la nieta de “Chicha” Chorobik de Mariani, co-fundadora de Abuelas de Plaza de Mayo”, describió la diputada electa que asumirá este 10 de diciembre su banca en el Congreso.
“También es responsable de otros operativos como el que se llevó a cabo para secuestrar a los estudiantes secundarios en lo que se conoce como la “Noche de los Lápices”. Tuvo varios centros clandestinos a su cargo, como “La Cacha”, Arana o Comisaría 5ta, entre otros”, sumó.
“Mientras, seguimos preguntando: ¿dónde está Clara Anahí? El actual Jefe del Estado Mayor General del Ejército, el Teniente General Carlos Alberto Presti, que ahora dejará su cargo para asumir como el nuevo Ministro de Defensa ¿le habrá preguntado por ella a su padre, como hubiese hecho cualquier persona no comprometida con la impunidad? ¿Sabe quién se apropió de Clara Anahí Mariani?”, sintetizó Bregman
Otro querellante destacado en las causas por crímenes del terrorismo de Estado, Pablo Llonto, al frente del Colectivo de Abogados Mario Bosch, calificó la situación como una “enorme preocupación” y advirtió que la llegada de Presti podría afectar las políticas de Memoria, Verdad y Justicia.
“Le pone sombras a la continuidad democrática, porque simbólicamente es un retroceso”, opinó, y advirtió:
“Todo lo que venga de Defensa de aquí en adelante respecto a los juicios por delitos de lesa humanidad no va a aportarlo. Antes se contestaban los pedidos judiciales, pero esto genera incertidumbre”
El Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos (MEDH) también manifestó su “más enérgico repudio”
Con la firma de sus copresidentes Elisa Oshiro y Luis María Alman Bornes, el organismo religioso expresa la acción oficial “constituye un grave retroceso en uno de los pilares fundamentales de nuestra democracia, que buscó terminar con la influencia castrense en la vida política tras la última y sangrienta dictadura cívico-militar-empresarial”.
Al respecto de las acusaciones que pesan sobre el padre del flamante ministro, el MEDH lamenta que “la sombra de estos crímenes atroces, que claman por memoria verdad y justicia, se proyecta ahora sobre la más alta oficina de defensa de la Nación”.
“Esta designación no es un hecho aislado, sino que se inscribe en un patrón alarmante del gobierno de Javier Milei y Victoria Villarruel: la fuerte presencia de familiares de genocidas en cargos de poder y la adopción de una posición abiertamente negocionista y reivindicadora del terrorismo de Estado” que “pretende relativizar y hasta justificar el horror genocida, deshonrando a las 30.000 víctimas y burlándose del consenso social y jurídico que sostiene que estos crímenes no prescriben y no pueden ser reconciliados”, denuncian.
“Por eso –finalizan Oshiro y Alman Bornes-, apelamos a la memoria histórica que nos constituye como pueblo y a la conciencia de toda la sociedad para rechazar firmemente este intento de blanquear la historia y militarizar la política”.
Ernesto Alonso, secretario de Derechos Humanos del CECIM La Plata, advirtió con dureza sobre la reciente designación. Para Alonso, ese nombramiento no puede separarse de los “antecedentes políticos, familiares e ideológicos” de Presti, y representa un “giro ideológico profundo” que amenaza las bases de la memoria, la soberanía y la conducción política de las Fuerzas Armadas.
En conversación con FM del Pueblo de Rio Grande, El ex combatiente trazó un balance de lo que considera “tres errores históricos” que marcaron a las Fuerzas Armadas argentinas: el golpe de Estado de 1976 y el terrorismo de Estado, la Guerra de Malvinas de 1982 y la subordinación estratégica al alineamiento con Estados Unidos. En ese contexto, expresó preocupación de que con la nueva conducción “lamentable”, las decisiones militares vuelvan a priorizar intereses ajenos a la soberanía nacional.
Además, criticó lo que describió como un desmantelamiento institucional del sistema de defensa: señaló que se están vaciando áreas claves —especialmente las relacionadas con Derechos Humanos—, entregándole el manejo a funcionarios con discursos negacionistas, lo que pone en riesgo los archivos históricos que son centrales para la causa de memoria, verdad y justicia. También alertó sobre la posibilidad de que las Fuerzas Armadas vuelvan a intervenir en conflictos internos, en un país atravesado por una “grave crisis social e institucional”.
“Van a cometer un nuevo error histórico”, insistió, aludiendo a la “combinación entre conducción política debilitada, formación deficitaria y alineamiento automático con intereses ajenos a la soberanía argentina”.
