Redacción Canal Abierto | Los recortes en el Ministerio de Cultura amenazan dejar a 64 trabajadores en la calle. Como respuesta, cacerolas, bombos y aplausos se hicieron sentir frente a la sede de calle Alsina al 400 como un “ruidazo” que denuncie la política de ajuste fiscal y de vaciamiento de programas culturales que impulsa el Gobierno.
La protesta fue impulsada por la junta interna de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) en Cultura, que incluyó un corte de calle y contó con la solidaridad de militantes y delegados de otros sectores, y la presencia de la CTA-Autónoma y de miembros de la conducción nacional del sindicato.
En agosto pasado, desde el sindicato habían alertado sobre la virtual parálisis del Ministerio que conduce Pablo Avelluto y la reducción, en la práctica, del 30% del presupuesto 2017, la antesala de los despidos. Manuel Cullen, delegado general de ATE Cultura, expresó: “En 2001, uno de los cantos era ‘piquete y cacerola, la lucha es una sola’. Ahora, como pueblo, dimos un paso cualitativo que es asumirnos todos como trabajadores. No hay por un lado cacerola y por otro piquete, hay una clase que está diciéndole basta a este Gobierno y vamos a continuar en la calle”.
Durante el acto se expresaron despedidos –algunos con más de diez años de antigüedad- y delegados del Enacom y el Incaa, entre otras entidades, quienes dieron cuenta de la situación en cada lugar de trabajo, donde se reiteran los despidos o la amenaza de cese de contratos.
Mañana a las 10 de la mañana se realizara una asamblea en el hall de la sede del Ministerio de Cultura, en la que los trabajadores definirán cómo continúa el plan de lucha.
Fuente: Prensa ATE
Foto: Luciano Dico