Redacción Canal Abierto | En una nueva medición de la canasta de adultos mayores, la Defensoría de la Tercera Edad observó el incremento de un 10,08% en el período comprendido entre diciembre 2017 – marzo 2018, la cual cerró en un valor de $19.290,35.
Durante el ciclo analizado, los organismos de medición registraron los costos de lo que consume un adulto mayor, que al 1 de abril se desglosan de la siguiente manera: $3.986 en alimentos, $3.894 en medicamentos (con descuentos), $5.670 en vivienda, $1.942 en higiene y limpieza, $1.200 en ropa, $1.002 en servicios, $800 en transporte y $775 en recreación.
Si se tiene en cuenta el haber mínimo de $7.660, la gran mayoría de los jubilados se encuentran en un 40% por debajo del valor total de la canasta. Incluso aquellos que cobran una jubilación media de $11.628 –favorecida por la Ley de Reparación Histórica-, o quienes agrupan dos haberes entre jubilación y pensión, no logran cubrir la totalidad de las necesidades.
Esto significa que el 70% de los más de 5.8 millones de jubilados que tiene el país no llega a cubrir los gastos básicos del mes.
Según lo expuesto por la Defensoría de la Tercera Edad, “actualmente, los haberes mínimos de $7.660 no llegan a alcanzar al Salario Mínimo Vital y Móvil de $9.500. Sin olvidar que las Pensiones No Contributivas y la Pensión Universal para Adultos Mayores están en un rango por debajo del 70 – 80% de una jubilación mínima, alrededor de $5.362 y $6.128, respectivamente”.
Por este motivo, desde el organismo exigen una recomposición de estos haberes con un aumento de emergencia y a su vez que los jubilados, a través de sus representantes, participen en el debate del Consejo del Salario.
Además, convocan para los primeros quince días de junio a las Organizaciones No Gubernamentales de Defensa del Consumidor, Universidades, representantes de las comisiones de Seguridad Social de ambas cámaras del Congreso de la Nación, Sociedad Argentina de Geriatría y Gerontología (SAGG), Sociedad Iberoamericana de Gerontología y Geriatría (SIGG) y autoridades del INDEC a realizar un debate metodológico sobre esta canasta, abierto a la sociedad, “para que sea el propio INDEC quien calcule esta medición en un futuro, dándole a este instrumento el carácter oficial que amerita”.
En cuanto a los aumentos percibidos, si se toman los índices de inflación general, la suba que tuvieron los jubilados los superó por muy poco. En abril no cobrarán plus o bonos compensatorios, por lo que el sueldo será menor que en marzo. Y en junio recibirán un aumento del 5,69%, que llegará a notarse o no de acuerdo a la inflación que se presente.