Redacción Canal Abierto | Tras la represión sufrida en el día de ayer, los gremios estatales nucleados en la Mesa de Unidad Sindical de Chubut, continúan las medidas de fuerza iniciadas hace un mes. Estas incluyen paros, retención de tareas, ocupaciones de organismos públicos y cortes de ruta.
La represión del día martes 26 de junio se dio en un marco en el que habían comenzado a concretarse reuniones paritarias, aunque con ofertas insatisfactorias para los gremios. Los trabajadores que se econtraban manifestando frente a la Casa de Gobierno de Chubut en Rawson, fueron atacados por las fuerzas de seguridad con palos y gas pimienta. El correr de la noticia provocó movilizaciones espontáneas en las principales localidades de la provincia patagónica.
Claudia Barrionuevo, titular de la CTA Autónoma chubutense, manifestó en diálogo con Canal Abierto que «estamos lejos de un aumento, pero sí con mucha gente determinada a continuar con esta pelea».
Sobre las negociaciones en curso dijo que «tenemos el sueldo congelado desde hace más de un año. Las paritarias deberían haber empezado en el mes de marzo y recién estamos iniciando las primeras reuniones, que no garantizan que tengamos un aumento en el corto e inmediato plazo, que es lo que la gente está necesitando. Por eso uno de nuestros reclamos principales en este momento es un aumento de emergencia como paliativo de esta crisis hasta terminar la negociación seria en cada una de las paritarias. Esto hasta ahora no ha tenido eco en el gobierno, pero es un reclamo fuerte que seguimos sosteniendo».
Sobre el paro nacional convocado por CTERA en solidaridad con la lucha de los estatales neuquinos, Barrionuevo manifestó que la medida «fue tomada con esperanza y expectativa de visualizar este conflicto a nivel nacional. Hoy tenemos un cerco mediático muy importante que impide poder transmitir el grado de conflictividad que hay en la provincia hacia el resto del país».