Redacción Canal Abierto| El Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires redujo las raciones de las viandas de los comedores de la ciudad. Esta reducción, que consiste en bajar la cantidad de raciones según las asistencias en días en los que se realizan auditorias, se suma a la hecha a comienzos de este año, cuando se redujo el gramaje de cada ración.
«A las escuelas están yendo auditorias que se quedan 3 ó 5 días toman asistencia media y a partir de ahí hacen esa reducción. Nosotros entendemos que no refleja la realidad de las escuelas. EN el caso de la Escuela 19 de Soldati que es donde yo trabajo tenemos 705 alumnos y hay 630 viandas, con lo cual, más allá del argumento del promedio que hacen hay una cantidad de niños que queda sin la vianda. Como consecuencia, cuando hay alta asistencia no alcanza el alimento para los chicos» dijo Jorge Adaro, titular de Ademys, el gremio que denunció esta situación, en diálogo con Canal Abierto.
En la Ciudad de Buenos Aires, el comedor escolar no cumple (o al menos no necesaria o solamente) una función social, ya que en este distrito se implementa la modalidad de jornada completa que incluye el almuerzo. Esto implica que, a diferencia de en otras jurisdicciones, el comedor no es optativo.
Adaro remarca que «hay una combinación de reducción de gramaje, reducción de raciones y también de la calidad de los alimentos que se utilizan. En el primer caso, se pasó de un cuarto a un octavo de pieza de pollo. En el segundo hay escuelas que reciben hasta 100 raciones nuevas. Y en las frutas uno ve que no es la calidad que los niños merecen»
Consultado por la respuesta de las autoridades, Adaro dice que «el gobierno de la Ciudad no se hace cargo absolutamente de nada, de esto tampoco. Ellos dicen que están ajustando y sincerando la cantidad de alumnos que concurren. Nosotros rechazamos esto de plano porque nos manejamos con las matriculas que presentan las direcciones escolares. Y la cosa es sencilla: si hay 700 chicos tiene que haber 700 raciones. No podemos especular con la asistencia media. Porque un día pueden faltar 15 pibes, pero no se puede priorizar esa especulación antes que garantizar el alimento para todos los chicos»