Redacción Canal Abierto| Mediante la Resolución COnjunta 2/2018 firmada por los ministros de Seguridad, Patricia Bullrich; de Seguridad Oscar Aguad y de Transporte Guillermo Dietrich, el Gobierno Nacional autoriza la intervención de la Fuerza Aérea en el control de la aeronáutica comercial,
Con el pretexto de la próxima cumbre del G20, las autoridades ministeriales justificaron la resolución amparándose en motivos de seguridad y de la envergadura del evento. Sin embargo, desde los distintos gremios se alerta que, al no tener un rango temporal específico, podrá ser utilizado a futuro para romper medidas de fuerzas impulsadas desde cualquier sector laboral de los aeropuertos.
En diálogo con Canal Abierto, Marcelo BEllelli, delegado de ATE-ANAC, sostuvo que «la realidad es que la resolución le da atribuciones al Ministerio de Transporte para que, en caso que lo solicite, pueda intervenir la Fuerza Aérea en el manejo operativo del aeropuerto. Creemos que esto está asociado para poder romper una medida de fuerza en caso que se quiera llevar adelante.»
Por otra parte Belleli remarcó el retroceso que esto implica en materia de injerencia de las fuerzas armadas en la vida civil, desde que en 2006, mediante un decreto se apartara a la Fuerza Aérea del control del espacio aeronáutico para cederlo a autoridades civiles. «Durante el gobierno de Kirchner habíamos logrado la creación de la ANAC como organismo civil. Esta situación lo que genera es voler 10 ó 15 años atrás, cederle a un fuerza armada que no está dotada ni formada para esa tarea la dirección operativa de los aeropuertos a discreción del Ministerio de Seguridad sin establecer las pautas claras de esa discrecionalidad que se va a establecer» sostuvo.
«Desde ATE repudiamos esa acción y vamos a poner en visibilidad de agenda pública esta situación que afecta la situación operacional cotidiana en el país, porque abre la puerta para que personal de la Fuerza Aérea, sin la capacitación adecuada pueda cumplimentar tareas claves y sensibles para la seguridad de los vuelos en Argentina » concluyó Belelli.