Redacción Canal Abierto | Hoy comienza el juicio por el femicidio de Araceli Fulles, asesinada en 2017 y hallada debajo de los escombros de una casa de la localidad bonaerense de José León Suárez. Ayer, durante los comicios, la policía detuvo a Carlos Damián Cassalz, uno de los imputados del caso, en un centro de votación de San Martín.
El debate oral será presencial y Mónica Ferreyra, madre de Araceli, será la primera en declarar. Luego lo harán su marido, sus hijos y las otras personas que estuvieron en el asado el día que desapareció la joven, el 2 de abril de 2017. Se estima que el juicio, a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal N°5 de San Martín, integrado por los jueces Martín Klobovs, Carolina Martínez y Aníbal Bellagio, se extienda hasta principios de octubre.
Hasta ahora, el único detenido había sido Darío Badaracco, quien murió el 13 de abril de 2019 tras ser atacado a golpes y quemado con agua caliente por dos compañeros de celda en el penal de Sierra Chica. Los imputados que llegan a juicio son Hernán Rodrigo Badaracco, Carlos Cassalz, Hugo Cabañas, Carlos Antonio Ibarra, Marcelo Escobedo, Daniel Alaniz y los hermanos Jonathan y Emanuel Ávalos.
Estos acusados llegan en libertad por un fallo de la Cámara de Apelaciones de San Martín que en septiembre de 2017 consideró que por la “ineficiencia del sistema investigativo” no pudieron obtenerse las pruebas necesarias para probar sus participaciones en el hecho, en un caso envuelto en sospechas de complicidad policial para garantizar el encubrimiento.
La detención de Cassalz se produjo luego de que la madre de Araceli denunciara haber recibido hace 15 días un video intimidatorio de 9 nueve segundos que mostraba al imputado portando una ametralladora. Sobre la procedencia de este material, Ferreyra dijo desconocer quién se lo mandó, “pero tomé captura de pantalla de lo que me mandaron, y lo denuncié ante la fiscal”.
El caso
Araceli, la joven de 22 años, fue hallada muerta el 27 de abril de 2017 debajo de unos escombros en el patio de la casa de Darío Badaracco, ubicada en Alfonsina Storni 4477, de José León Suárez, partido de San Martín. Había sido vista con vida por última vez la madrugada del 2 de abril, en una plaza cercana a su casa, y el último contacto con su familia fue a las 7 de la mañana de ese día, cuando le envió un mensaje a su madre.
La autopsia determinó que la joven murió por “asfixia mecánica por estrangulamiento a lazo con un elemento compatible con precintos plásticos”. La falta de resultados de los peritajes, la mala conservación de las muestras recolectadas en el lugar del hallazgo del cuerpo y el sembrado de pistas falsas fueron los argumentos Carlos Hermelo, presidente de la Cámara de Apelaciones de San Martín para mantener en libertad a los acusados.