Canal Abierto Radio | Mientras el nuevo Ministro de Agricultura Julián Dominguez anunciaba la apertura de exportaciones irrestrictas de carne a China garantizando el consumo interno, el empresario y referente de la industria cárnica Alberto Samid analizó los cambios en el gabinete y las medidas económicas que inciden en el sector.
Samid, uno de los primeros en halagar el cupo a las exportaciones, fue crítico con esta apertura: “Había sido una muy buena medida porque a partir de ese momento no subió nunca más la carne. Subieron los salarios y la carne quedó en el mismo precio, inclusive bajó un poquito y más o menos la gente la puede comer”.
Con respecto a la apertura, dijo: “quedamos bien con los ganaderos, que no nos votan y quedamos mal con el pueblo argentino que nos vota. Al liberar las exportaciones, exportamos más de lo que tenemos y el precio se va arriba otra vez”.
“La carne nuestra vale tres veces más afuera” y los exportadores presionan para tener esas ganancias, afirma. Para Samid, los niveles de producción actual permiten que se exporte entre el 7 y el 10 por ciento de la producción, pero “al liberar el nivel de las exportaciones estamos exportando más del 30 por ciento, nosotros no tenemos un 30 por ciento de nuestra producción para exportar. Si exportamos más, nos estamos metiendo con la mesa de los argentinos” aseguró.
El empresario subrayó que cuando Argentina no tuvo buenos niveles de exportación por epidemias ganaderas y otros factores, los argentinos y argentinas llegaron a consumir 100 kilos per cápita anuales, comentó el empresario, pero hoy ese consumo ronda los 40 kilos.
Sin embargo, “la entrada de divisas de la carne es insignificante”, sobre todo en comparación con la soja y otras commodities. Representan unos 2.000 millones de dólares, mientras la soja implica 40.000 millones de dólares, explica Samid, siempre y cuando se cuiden las fronteras y el contrabando. “Sacarle la carne de la mesa a los argentinos por 2500 millones no vale la pena” sentenció.
El gobierno luego de las PASO
Consultado por los cambios en el gabinete, y en particular en el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, aseguró que la designación de Julián Domínguez “es un cambio muy bueno”. “Son muchachos que tienen mucha experiencia, pero los problemas no pasan por ahí, son varios problemas. Sí hablamos de la elección, es una cosa, y si hablamos de como soluciono los problemas del país es otra”, comentó.
“Los cambios son positivos, pero lo que no veo positivo es la idea del Gobierno: nosotros tenemos un problema gravísimo, y todavía no lo sabemos resolver, es como tener una enfermedad y no sabemos de dónde viene. Nosotros le echamos la culpa a (Mauricio) Macri, y el problema no pasa con Macri. Nosotros los argentinos tenemos el país más rico del mundo, porque tenemos todas las riquezas, pero donde hay una riqueza permitimos que haya un cipayo que nos robe todo”, señala Samid.
Ejemplifica con la situación en el Mar Argentino, donde buques asiáticos atraviesan la milla 201 y sobrepescan la región; o el caso de la minería de oro, plata y bronce, donde las multinacionales se llevan el metal pero no dejan ganancias; o el contrabando con barcazas de las plantaciones de soja hacia Paraguay o Brasil en el Río Paraná.
“Con Vaca Muerta nos decían que nos iba a salvar, que teníamos petróleo y gas por 400 años, y vi pasar miles y miles de camiones que iban al sur para poner los tubos para el petróleo. Hoy Vaca Muerta está funcionando extraordinariamente bien , y el petróleo vale 80 dólares el barril, como nunca. Todos los meses, batimos récord de producción. ¿A dónde está esa plata? ¿Quién se la lleva? ¿No era que nos iba a salvar Vaca Muerta? Bueno, ahí se la llevan dos vivos nada más. Y va a pasar lo mismo con el Litio”.
Samid remarcó: “Toda la riqueza que nosotros tenemos se la llevan y tenemos que atacar ese tema, terminar con la minería, terminar con el petróleo, el gas, la pesca, ahí tenemos que atacar como Gobierno nacional, ahí está la plata. Estamos peleándonos con el macrismo por migajas y acá hay un poder oculto, un poder superior que se lleva todo. Y por qué no van a la embajada de Estados Unidos, principalmente, que se lleva lo de Vaca Muerta con la Chevron y se lleva el litio de Catamarca”.
Y subrayó: “Nosotros no tenemos que hablar más del macrismo, porque en cada lugar hay un cipayo que por el 10 por ciento entrega nuestra riqueza. En los países del primer mundo no vas a encontrar ningún cipayo que por el 10 por ciento te regale las riquezas”.
El peronismo luego de las paso:
“Lo mejor que nos puede pasar es que perdamos”
“Lo mejor que nos puede pasar es que perdamos”
El empresario frigorífico criticó que en el armado del Frente de Todos no se convoque a las distintas corrientes del peronismo, y apuntó contra el kirchnerismo que “cuando le va mal convoca a todos y cuando llega al gobierno no les da ningún lugar, y encima cuando vienen las elecciones no los dejan participar para nada”.
Además, señaló que en las elecciones del Partido Justicialista, tanto a nivel nacional como en la provincia de Buenos Aires, se impidieron las presentaciones de listas. “Y como si fuera poco, después vinieron las PASO y no dejaron participar a nadie y a todos los peronistas que quisieron participar les bocharon las boletas”, indicó.
Apuntó contra Santiago Cafiero, jefe de Campaña: “tendría que haber advertido que la sociedad en su momento no estaba ni con nosotros ni con ellos, no querían un lado ni otro”. Entonces el frente Juntos usó la Ley de Lemas que es sumar los puntos que se juntan en varias listas, para sostener un aparente triunfo en las PASO.
“Lo mejor que nos puede pasar es que no ganemos, que perdamos, entonces nos vamos a poner las pilas y dentro de dos años vamos a volver a ganar. Si tenemos la desgracia de mejorar ahora, nos vamos a creer que somos campeones mundiales, vamos a seguir siendo soberbios, no convocando hasta al último. En cambio si llegamos a perder, cada ministro, cada militante de La Cámpora, cuando se levante en la mañana, salga y vea a la vecina le va a decir: “¿cómo le va, señora que tal, qué necesita?”.