Por Pablo Bassi (desde Río Negro) | Víctor Vázquez de 32 años murió el 22 de junio a la madrugada mientras realizaba una maniobra sin inspectores presentes en un pozo nuevo de YPF en Vaca Muerta en Barda del Medio al norte de Río Negro. Vázquez era operario con diez años de experiencia al igual que Hugo Rodríguez, quien permanece en observación fuera de riesgo por inhalar gases y el shock brutal de ver morir a su compañero por el golpe de una válvula o una llave, lo que está siendo peritado.
El Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro y Neuquén convocó a una huelga de 24 horas porque la muerte podría haber sido evitada con una maniobra a la luz del día bajo supervisión de inspectores de YPF, aseguran desde el gremio.
La Unión de Sindicatos Petroleros de la República Argentina indicó que Vázquez murió “producto de la negligencia e inoperancia de las compañías de la industria petrolera que operan en la provincia de Río Negro”.
En diálogo con Canal Abierto, el secretario general del Sindicato de Petróleo y Gas Privado, Marcelo Rucci, informó que “es normal que en tareas de riesgo haya inspectores de la empresa o alguien de seguridad al lado. Nosotros veníamos denunciando que esto no ocurre en varias empresas”.
– ¿Por qué razón?
– Porque ponen a producir todo lo que puedan.
Rucci: "hay un compañero que murió, hay una familia destrozada, hay todas las consecuencias que trae esto, que nosotros en Río Negro hemos hecho todas las denuncias, como las hemos hecho en Neuquén.
— Sindicato de Petroleros Privados (@sindpetroleros) June 22, 2022
Según informa el Diario Río Negro, el pozo exploratorio de YPF había sido cavado días atrás y se encontraba ahora bajo operación de la contratista Rakiduamn. Uno de los dueños, Mariano Aiassa, afirmó que el equipamiento estaba montado de acuerdo a la ingeniería y que no hubo ninguna falla mecánica y que todos los materiales estaban certificados. El empresario apuntó a una válvula, que había sido reemplazada tiempo atrás por mantenimiento.
El comunicado de la Unión de Sindicatos Petroleros de la República Argentina apuntó contra la Justicia rionegrina a la que acusó de “cómplice en este accidente por cuanto obstruye e intenta amedrentar a los compañeros que cumplen el rol de denunciar las deficientes instalaciones y condiciones en las que se desempeñan”.
Marcelo Rucci explicó que el sindicato realizó una presentación en el Ministerio de Trabajo de la Nación para que se ponga en marcha una Comisión de Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo bilateral, pero nunca fueron convocados.
El sindicato, no obstante, avanzó con inspecciones unilaterales en algunas empresas y sugirió revisiones, pero se encontró con la resistencia de compañías como DeltaP que a través de su abogada Florencia Arietto, la influencer que reviste entre los halcones del PRO, realizó una denuncia por extorsión. Debido a ello seis delegados fueron procesados y el sindicato denunció que “dirigentes petroleros están siendo perseguidos por el Poder Judicial de la provincia de Río Negro producto de las inspecciones de seguridad e higiene que el sindicato ha realizado sistemáticamente en las empresas que no cumplen con la normativa provincial y nacional”.
A efectos de un golpe certero, atrapados en el fuego o caídos al vacío murieron en los últimos cuatro años en Vaca Muerta al menos 11 trabajadores: Víctor Vázquez, Cristian Baeza, Maximiliano Zappia, César Poo, Julio César Sánchez, Daniel Torres, un ingeniero de Schlumberger cuyo nombre no trascendió, Miguel Ángel Chocala Fernández, Mauricio Segura, Ariel Marcelino Sajama y Ariel García.