Canal Abierto Radio | El Gobierno argentino calificó como un «hito fundamental» la nueva postura de la Unión Europea (UE), que en un acuerdo con la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) reconoce a las Islas Malvinas como un «territorio en disputa» y ya no como un «territorio de ultramar europeo».
La cuestión Malvinas figura en dos de los 41 puntos de la Declaración final del encuentro, junto a la firma de los presidentes del Consejo Europeo, Charles Michel, y de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen.
La histórica declaración conjunta de la UE-Celac sobre la cuestión Malvinas prosperó en ese encuentro pese a las «presiones» realizadas por Gran Bretaña para obstaculizar una mención a la disputa de soberanía respecto al archipiélago del Atlántico Sur.
Así lo reveló el secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, Guillermo Carmona, quien destacó como un «paso muy importante» que, por primera vez esta cumbre birregional haya adoptado una moción sobre la Cuestión Malvinas como territorio en disputa.
“Interpretamos como una nueva ventana de oportunidad la instalación de la cuestión Malvinas en los ámbitos de discusión internacional”, planteó Ernesto Alonso, del Centro de Ex Combatientes Islas Malvinas – La Plata (CECIM), en diálogo con Canal Abierto Radio. “La recuperación de nuestro territorio es un trabajo de largo aliento, y son positivos todos los esfuerzos en ese sentido”.
“También es importante leerlo como un avance respecto de la posición que se mantuvo durante la administración de Mauricio Macri, cuando se firmó el nefasto pacto `Foradori-Duncan´”, agregó Alonso. Con aquel acuerdo sellado en 2016, los británicos lograron imponer condiciones como «remover todos los obstáculos que limitan el crecimiento económico y el desarrollo sustentable de las Islas Malvinas». Entre estos elementos incluyeron «comercio, pesca, navegación e hidrocarburos».
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En un libro, un ministro británico reveló que el entonces vicecanciller argentino, Carlos Foradori, estaba «totalmente borracho» cuando se selló el entendimiento, al punto que este “no recordaba lo que había concedido”.
El Cecim inició una causa contra el diplomático en cuestión y la entonces ministra de Relaciones Exteriores, Susana Malcorra, por “incumplimiento de los deberes de funcionario público”. El ex combatiente platense contó: “dada la connivencia del Poder Judicial con ese sector político, ya se imaginarán dónde terminó la denuncia”.