Redacción Canal Abierto | “El prestigio profesional de Brieger logró enmascarar su perversión”. La frase resume gran parte del espíritu del documento que desde Periodistas Argentinas presentaron este martes en el Senado de la Nación titulado La cultura del acoso: punto y aparte, en el que relevan las historias de 19 mujeres que denunciaron hechos de acoso por parte del periodista especialista en política internacional Pedro Brieger.
“Tenía 25 años, daba mis primeros pasos en el periodismo. Él era bastante más grande que yo y un referente en temas internacionales. Cuando me presenté, le dije que quería dedicarme de lleno a lo internacional, que me gustaría que me contemplara si encaraba una búsqueda laboral. Me dijo que no tenía nada concreto para ofrecerme, pero que podía ayudarlo con las noticias sobre Siria, algo que comencé a hacer sin percibir un salario. Este trabajo no remunerado se mantuvo unos meses y a la par cursé su materia de Sociología de Medio Oriente (UBA). Un día fui a hacerle una entrevista para un portal digital en el que trabajaba. Me citó en el centro cultural Caras y Caretas, donde hacía su programa de radio, en la AM750. Fuimos al hall y mientras lo entrevistaba se masturbó ahí mismo, delante mío, mientras yo le pedía por favor que no lo hiciera. Había gente cerca, pero no le importaba nada. Me llevó años entender que no había tenido la culpa”.
Distintos pero parecidos, los testimonios de suceden uno a uno a lo largo del informe y coinciden en varios puntos que hablan de un patrón y de sistematicidad: mujeres menores, en asimetría de poder, en situaciones de soledad.
Comentarios sexuales inesperados en conversaciones sociales o contextos laborales, exhibicionismo y manoseos sin consentimiento fueron prácticas recurrentes de Brieger a lo largo de los últimos 30 años, según relatan las denunciantes colegas, alumnas, vecinas.
El comienzo
A partir de una nota de Alejandro Alfie que daba cuenta de un juicio laboral que Brieger había ganado, la periodista Cecilia Guardatti comentó el posteo en redes sociales e hizo pública su historia de acoso, vivida catorce años antes en una cobertura internacional. Desde entonces, se sucedieron las denuncias que desde Periodistas Argentinas suponen son muchas más que las 19 que lograron relevar en pocos días.
“En Argentina existen leyes para penalizar el acoso callejero, pero no para aquellos agravios que se producen en el ámbito laboral y académico: esa es la gran deuda que este informe pretende saldar y por eso mismo proponemos que se legisle específicamente este tipo de conductas abusivas”, plantean.
Asimismo, exigen medidas reparatorias que van desde espacios para campañas de prevención y erradicación del acoso en los medios de comunicación públicos y privados y las universidades públicas y privadas donde se produjeron estos hechos hasta “procedimientos claros y ampliamente informados para canalizar denuncias, a cargo de personas capacitadas para garantizar la no revictimización y la confidencialidad que requieren estos casos”.
Y que Pedro Brieger pida disculpas públicas a las afectadas, quien hasta el final de esta nota, aún no se había pronunciado.
Informe completo