Redacción Canal Abierto | Un informe de la ingeniera María Eva Koutsovitis y el abogado Jonatan Baldiviezo publicado por el Observatorio del Derecho a la Ciudad reveló que el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, encabezado por Jorge Macri, preadjudicó la concesión del predio Costa Salguero a una sociedad integrada por el Grupo Clarín y La Nación.
La sorpresa: la oferta rechazada era la de La Rural S.A., que había puesto una cifra casi un 30% más alta por mes. Esto desató críticas y sospechas de que, más allá de los números, la jugada apunta a reforzar vínculos de poder político-mediático.
Según los cálculos del ODC, “si Clarín + La Nación explotan Costa Salguero durante 10 años, con ingresos típicos de eventos, ferias y alquileres, y pagando el canon que quedó fijado, el beneficio acumulado puede rondar los 65 mil millones”.
En esta nota, los puntos sobresalientes del relevamiento.
La historia detrás del predio
Costa Salguero nació de rellenos sobre el Río de la Plata. Su uso comercial arrancó en 1994 con la concesión a Telemetrix S.A., que manejó el predio casi 30 años. Durante todo ese tiempo crecieron las críticas: mientras Telemetrix pagaba un canon fijo y devaluado, subalquilaba espacios para eventos, oficinas y estacionamientos, generando ingresos mucho mayores que lo que pagaba al Estado.
Cuando la concesión venció en 2021, el contrato se prorrogó de manera precaria. En paralelo, el predio se convirtió en un símbolo político: sirvió como búnker de campaña del partido gobernante, borrando la línea entre espacio público y estructura partidaria.
Por qué se frenó la venta definitiva
La gestión de Horacio Rodríguez Larreta había intentado vender Costa Salguero para construir un barrio de lujo: torres, comercios y oficinas, dentro del proyecto “Distrito Joven”. Pero la resistencia social fue enorme: audiencias públicas repletas, un rechazo del 98% entre quienes participaron y luego una batalla judicial que terminó declarando inconstitucional la venta.
Con ese fallo, la venta quedó descartada y el camino quedó despejado para retomar el esquema de concesión. En 2024 se habilitó la posibilidad de un uso “centro de convenciones”, una salida más cómoda para el gobierno porteño.
La licitación reciente: números y decisiones
En 2025 se abrió la licitación para concesionar el “Sector 5” de Costa Salguero por diez años, con explotación para eventos, ferias, congresos y espectáculos.
La Rural S.A. ofertó 310 millones de pesos mensuales.
La unión entre Clarín y La Nación ofertó 240 millones mensuales.
Aunque la oferta de La Rural era más alta, la comisión evaluadora sostuvo que su plan de negocios tenía inconsistencias y que, con ese canon, el proyecto no era viable. Por eso la descalificaron. La propuesta de Clarín-La Nación fue presentada como la opción “equilibrada y sostenible”. Así, la concesión terminó en manos de los dos grandes medios del país.
Qué significa este negocio para los medios
Para Clarín y La Nación, tener un predio propio implica pasar de ser simples narradores de la agenda pública a protagonistas de un negocio directo: ferias, espectáculos, congresos, eventos corporativos y un espacio físico para desarrollar actividades propias.
En un contexto donde los ingresos tradicionales de la prensa vienen cayendo, la diversificación se vuelve clave. Un venue así les garantiza ingresos fuertes y un activo simbólico de peso.

Qué significa para la ciudad… y para la ciudadanía
Para quienes reclamaban un parque público de acceso real al río, esta concesión confirma que el predio seguirá dentro del circuito de explotación privada. El acceso podría quedar limitado a quienes paguen por eventos u actividades, con la mediación de seguridad privada y cercos.
El Estado porteño, al elegir la concesión en lugar de la venta, renuncia a un ingreso inmediato a cambio de un canon sostenido. Para algunos es pragmatismo fiscal; para otros, una privatización encubierta que mantiene la lógica de negocios sobre la costa.
Políticamente, la operación es leída como un gesto fuerte hacia los medios más influyentes: darles un negocio estratégico puede garantizar una cobertura más amable o, al menos, menos crítica en momentos clave.
La adjudicación de Costa Salguero a Clarín y La Nación marca un punto de inflexión. No es solo un alquiler: es una jugada política, económica y simbólica. El espacio público cedido para un negocio privado refuerza la alianza entre el poder político y el mediático.
¿Quién define el destino del espacio público? ¿El Estado, la ciudadanía o los grandes grupos de poder?


