Redacción Canal Abierto | La morgue del Pami I de Rosario se vio desbordada en los últimos días y los trabajadores del organismo tuvieron que acondicionar un sector de Ecografía y otros espacios para depositar los cuerpos que no están siendo retirados por las casas mortuorias. Ahora reclaman a las autoridades del organismo que envié un conteiner refrigerado al Policlínico de la calle Sarmiento hasta que se resuelva la situación.
El aumento de fallecimientos por la pandemia y una demora en el sistema de turnos de cremación generó el colapso sobre el que los trabajadores de salud del lugar ya habían advertido.
Guillermo Grand, delegado de la Junta Interna de ATE en PAMI, explica a Canal Abierto que los trabajadores vienen denunciando la gravedad del escenario “desde abril”.
“Hicimos el pedido del camión hace dos meses y desde Rosario, los directores del PAMI hicieron el pedido al Administrador, que es el responsable de los dos policlínicos de la ciudad, para que lo eleve a la gerencia y se haga efectivo, pero eso nunca pasó, nunca tuvimos respuesta y ahora el Administrador no viene a trabajar hace un mes por un parte de enfermo”, alerta el delegado.
“Estamos en un barco que se está hundiendo y no tenemos timón, no hay gestión en el organismo, no solamente para los muertos, tampoco la hay para los elementos de bioseguridad, no tenemos barbijos no tenemos alcohol, por momentos no tenemos los filtros para usar los respiradores, la desidia que vive el PAMI Rosario es terrible”, completa.
Un camión sanitario como los que se vieron en Nueva York durante la etapa más crítica de la pandemia ya fue instalado en el Hospital Eva Perón, en la localidad rosarina de Granadero Baigorria.
Sobre los riesgos que puede implicar la situación, Grand advierte: “Si esto sigue así tendremos que seguir cerrando oficinas para poner los muertos. No sabemos cómo termina esto si no traen el camión o habla el intendente o alguna autoridad de Rosario para que se lleven los muertos. El problema también son los contagios de enfermedades intrahospitalarias que genera tener un óbito al lado de la cama donde hay un paciente internado”.
Por último, el delegado de ATE llamó la atención sobre la situación general de la obra social en Rosario: “El PAMI, desde que esta intervenido por el gobierno en los años 90, viene decayendo precipitadamente, y en los últimos años del macrismo lo terminaron de liquidar. Esta gestión que tenemos ahora, que tiene, por lo que habla muy buenas intenciones, lamentablemente no ha tenido aun la capacidad para resolver los problemas estructurales que tiene el PAMI Rosario. Tenemos dos directores que están trabajando las 24 horas pero que no tienen las herramientas para solucionarlo porque no hay gestión administrativa para compras, para pliegos, para licitaciones. Por ejemplo, el domingo a la tarde en PAMI I no había termómetros!”, concluye.