Por Néstor Espósito | El ex administrador general de la Corte Suprema durante 15 años, Héctor Daniel Marchi, formuló una explosiva declaración ante el juez federal Ariel Lijo sobre las presuntas irregularidades en la Obra Social del Poder Judicial (OSPJN), uno de los expedientes del pedido de juicio político del oficialismo contra los cuatro jueces del máximo tribunal.
La declaración apunta directamente a las responsabilidades en esas “gravísimas” irregularidades –según Marchi- de los jueces Juan Carlos Maqueda y, desde 2021, también del presidente del tribunal, Horacio Rosatti.
“El Dr. Maqueda fue quien estuvo a cargo de la Obra Social hasta el 2021. Este hecho es innegable por las siguientes razones: El Dr. Maqueda lo reconoce expresamente en el mail que se leyó en la Comisión de Juicio Político y que él mismo envió a esa Comisión. Antes de que yo ingresara, la Corte, el Consejo y la Obra eran una sola unidad y controlada por el administrador”.
En efecto, la Comisión de Juicio Político cuenta con la copia de un mail enviado por Maqueda el 30 de agosto de 2021, cuando –según se desprende del texto- dejó la conducción de hecho de la obra social. La troika dominante de la Corte (Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Maqueda) sostiene que hasta 2018, cuando fue removido de la presidencia Ricardo Lorenzetti, era él quien centralizaba prácticamente todas las decisiones administrativas. Marchi es un hombre vinculado con Lorenzetti. Y, desde 2018, todas las decisiones se toman con la firma de tres ministros.
De allí surge el argumento que busca desvincular a Maqueda del manejo de la obra social.
Marchi desmintió ese razonamiento. “Cuando presidió el Dr. Lorenzetti, se distribuyeron las áreas entre los ministros (Zaffaroni y Lorenzetti en el CIJ, Argibay en el Cuerpo Médico Forense y la Oficina de la Mujer; Highton en la Oficina de Violencia Doméstica, etc.). Maqueda quedó a cargo de la Obra y pidió expresamente que no se lo incluyera en una acordada, lo que conozco porque a mí me toca certificar las acordadas; el Dr. Lorenzetti, que era presidente, me dijo que era decisión de Maqueda y éste lo ratificó”.
¿Cómo llegó Maqueda a tener bajo su tutela la Obra Social, hoy cuestionada por supuestas irregularidades administrativas, contables y, sobre todo, por falencias en las prestaciones médicas y sociales a sus afiliados?
Según la declaración de Marchi en Comodoro Py, “el 7 de abril de 2008 por resolución 447/08 expte. 2042/01 se designó directores a Aldo Tonón, Claudia Madies y Francisco Ramos (…). Maqueda propuso al Dr. Tonón y la Dra. Madies. Al poco tiempo, Maqueda hizo renunciar a Madies y a Ramos y quedó solamente el Dr Tonón”.
Aldo Tonón es un personaje central en esta historia. Médico personal y amigo de Maqueda, faltó en tres oportunidades a las citaciones de la Comisión de Juicio Político, que esta semana resolvió pedirle a un juez que lo haga comparecer por la fuerza pública.
Marchi explicó que tras la salida de los otros dos directores, “para reforzar su presencia en la Obra Social, el Dr. Maqueda propuso a su secretaria, Marta Herrera Alem y fue designada directora (en marzo de 2013) y vicepresidenta en abril/2013”. De esa manera, la Obra Social estaba bajo el manejo directo de dos íntimos allegados a Maqueda: su médico y su secretaria privada.
“Además, en el mail que leyó la comisión, él reconoce que el personal de su vocalía también participaba en otorgar turnos y otros trámites”, describió el ahora ex administrador de la Corte.
Tras el mail en el que Maqueda anunció informalmente su desvinculación de la obra social, “el Dr. Rosatti propuso al Dr. Althabe que fue contratado el 15 de octubre de 2021”. La referencia es a Mariano Althabe, sobre quien uno de los informes de Marchi –según afirmó él mismo- describe irregularidades en su desempeño.
“Este informe fue el que creó el principio de todos los problemas ya que el Dr. Rosatti no quería ni recibirlo ni publicarlo”, denunció Marchi.
Pese a su mail con el anuncio de salida, “el control (de la obra social) siguió en manos de Dr. Maqueda y de Dr. Rosatti pues en el Directorio siguieron Tonón y Althabe. Prueba de ello es que la administración sólo presentaba informes”.
En 2021 ocurrió otro hecho significativo sobre el funcionamiento de la obra social. “La acordada 19/2021 dispuso que la Administración debía presentar informes mensuales al Tribunal. Cuando presenté el primer informe, ya no gustó. Y por eso Rosatti propuso que se modifique y no sea mensual, sino semestral”.
Los jueces Rosatti, Rosenkrantz y Maqueda sostienen que si hubo irregularidades en la obra social, Marchi (y Lorenzetti) son los principales responsables. Por lo menos, por lo ocurrido durante diez años.
Ante el juez Lijo, Marchi lo refutó: “si la Administración hubiera estado en control de la obra, no me habría criticado a mí mismo, y la Obra Social hubiese tenido una administración mejor”.
Muy pagado de sí mismo, Marchi se ufanó de haber dejado por la fuerza la administración de la Corte “con 150 mil millones de reservas y cero pesos de deuda y habiendo incorporado tecnología de punta a la Secretaría General de Administración, lo cual informé a los Ministros”. En ese contexto, calificó como “raro” que se lo haya removido del cargo. “El solo hecho de que me trasladen inmediatamente después de mis informes sobre irregularidades en la Obra Social es una prueba clara de la conexión entre ambos hechos”.
“La Corte ordenó una auditoría basada en mi informe n° 1 de Supervisión. En él se denunciaron gravísimas irregularidades en la Obra Social y que avaló mis informes. Inclusive las notas de la propia Obra Social dan cuenta de estas irregularidades. Por lo tanto es una información objetiva, contable y probada. No es una mera declaración. Todos los informes de supervisión, recomendaciones y el acta final de trabajo y los papeles de trabajo que incluyen más de 18.000 fojas fueron entregados a la presidencia del Tribunal para su remisión a la Comisión de Juicio Político”.
Marchi apuntó al principal colaborador de Rosatti, Silvio Robles, como “el gran responsable de la persecución y la informalidad”.
“Por eso –añadió- promovió mi desplazamiento y está designando personal en áreas claves como Seguridad, Administración”. A Robles le atribuyó la eliminación del mail oficial de Rosatti: “es gravísimo que el presidente de la Corte haya eliminado su mail oficial en diciembre/2022. Con ello quedan ocultos todos los movimientos internos. La orden la dio Silvio Robles vía WhatsApp a la Dirección de Sistemas sin haberme informado a mí como máximo responsable. Esto surge como consecuencia de que el 1 de febrero de 2023 la Dirección de Despacho de la Corte quiere enviar mi informe mensual del mes de diciembre de 2022 de la situación presupuestaria y financiera de la Corte a los señores Ministros y el mail oficial del Dr. Rosatti lo rechaza (fue rebotado)”.
“La Dirección de Despachos consulta a la de Sistemas, y le contestan que fue dado de baja el e mail hrosatti@csjn,gov.ar el día 15 de diciembre de 2022 vía whapp enviado por el Sr. Silvio Robles y pidió que se usara Gmail”. El pedido coincide con el clímax del escándalo por las filtraciones de chats en los que Robles aparecía intercambiando información con el ex ministro de Seguridad y Justicia porteño Marcelo D’Alessandro.
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Néstor Espósito: @nestoresposito