Por Néstor Espósito | El ex vocero de la AFA en los últimos tiempos de Julio Grondona, el periodista Ernesto Cherquis Bialo, declaró esta semana ante el Tribunal Oral Federal número uno que “la causa de Fútbol para Todos fue una causa armada”. Durante una hora y media, Cherquis –quien fue testigo directo tanto del proceso para la creación de Fútbol para Todos así como la disolución y su reconversión en un negocio privado- brindó una explosiva explicación de cómo el ex presidente Mauricio Macri y su alfil en el fútbol (y en otros rubros), Daniel Angelici, llevaron adelante desde el gobierno esa iniciativa.
Durante la campaña electoral que lo llevó a la presidencia, Macri había anunciado la continuidad de Fútbol para Todos. Pero cuando llegó al poder cambió esa postura y terminó entregando por vía indirecta los partidos a dos cadenas internacionales de TV dedicadas a los deportes. Para ello, utilizó dinero del Estado para resarcir a la AFA y rescindir un contrato que estaba vigente. ¿Cuánto? Más de cien millones de dólares.
Cherquis explicó que la denuncia que formuló la legisladora Graciela Ocaña sobre supuestas irregularidades en el programa Fútbol para Todos (que actualmente está en espera de que se fije una fecha para el juicio oral) fue “armada, pergeñada para tres movimientos: intervenir la AFA, iniciar la causa y hacer caer el contrato que la AFA tenía con el Estado, habida cuenta que se produjo un cambio de administración gubernamental y había mucho interés en que se desactivara FpT, para lo cual había que tener elementos”.
“Conozco bien el caso. Yo fui el que anunció en conferencia de prensa que se iniciaba una nueva era y las consecuencias que esa nueva era generaba”.
Cherquis recordó que cuando Grondona acordó con el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner rescindir el contrato con Torneos y Competencias –que tenía los derechos antes de FpT- le dijo que ello le generaría problemas con el Grupo Clarín. “Nos van a hacer un juicio a la AFA y a posteriori va a haber otros juicios. Vamos a rescindir un contrato y esto va a tener consecuencias jurídicas para la AFA. (El Estado) nos pagan el triple, ¿estamos dispuesto?”. Cherquis recordó que “por unanimidad todos los clubes estuvieron de acuerdo”.
“Cuando volvíamos de Ezeiza Grondona me dijo que iba a ser tapa del diario durante muchos días seguidos, pero con la sabiduría del octogenario me dijo yo puedo aguantar”.
¿Cómo se gestó el final de Fútbol para Todos? “Fue muy burda la manera que se llevó a cabo, primero por una serie de notas periodísticas cuando la legisladora Ocaña había presentado la denuncia mediática. Sabíamos que detrás de la denuncia verbal de Ocaña se venía alguna cosa”.
Cherquis, quien estuvo muy enfrentado con Grondona pero finalmente terminó en una relación muy estrecha (a punto tal que hoy está escribiendo su biografía) aseguró que “no puede haber un procedimiento más cristalino que el que se fue pagando a la AFA los derechos del fútbol”. Y definió a la AFA como un ente que administraba y repartía ese dinero que provenía del Estado por el pago de los derechos de televisación del fútbol a los clubes.
Pero hacia 2017 “se convocó a los dirigentes de los clubes para decirles que la Secretaría General de la presidencia estaba dispuesta a resarcir con 1.800 millones de pesos la rescisión del contrato. Siempre que hablamos de plata se habla de dinero para clubes, la AFA es nada más que un ente administrador. AFA recibe el dinero y lo distribuye”.
Existía, según recordó Cherquis en su declaración vía Zoom ante el tribunal, “una orden entre el coordinador y la AFA, que estaba intervenida, cuyo representante en el seno de la institución era el presidente de Boca Juniors Daniel Angelici, que fue el que voceó a voz en cuello la oferta del gobierno. ‘Ustedes me firman la rescisión del contrato y yo voy a Casa de Gobierno y traigo 1.800 millones de pesos para rescindir el contrato y que desaparezca Fútbol para Todos”.
En junio de 2017, la cotización del dólar no llegaba a los 17 pesos. La cuenta arroja que el Estado, bajo la administración de Juntos por el Cambio, pagó más de 100 millones de dólares para dejar de tener los derechos que tenía asegurados por otros tres años. Es decir que pagó para desprenderse de un activo. Es como que una persona pusiera en venta su casa y le pagara al comprador para que la adquiriera a cambio de nada. ¿De nada?
“Los dirigentes –recordó el periodista- hicieron fila y firmaron la rescisión del contrato”.
“No se negoció nada. Esa decisión fue una orden de Casa de Gobierno a un coordinador que fue gerenciador de Racing Club, Fernando Marín, quien bajó la orden de que había que rescindir el contrato, que era una orden de Macri”.
Los derechos de televisación habían vuelto así, en lo formal, a la AFA. Pero entonces apareció una nueva forma de administración, una suerte de AFA paralela. “Los derechos del fútbol quedaron afectados a la organización de una Liga Profesional que operaba en unas oficinas en Puerto Madero y que se manejaba independiente de la AFA. Esa liga llevó adelante los nuevos contratos con quienes habrían de comprar los derechos rescindidos recientemente, con ESPN y TNT”.
Durante la vigencia de FpT, “el Estado le transfería a la AFA y la AFA y le pagaba la proporcionalidad que cupiere a cada uno de los actores del campeonato. Había tres categorías, la más alta eran Boca y River. (…) El pago se lo daba la AFA a la persona designada por cada club para retirar el cheque, se le hacía una liquidación y se le pagaba al club”.
Sin embargo, en la causa están procesados ex funcionarios públicos, especialmente ex jefes de gabinete como Jorge Capitanich y Aníbal Fernández.
Cherquis explicó, no obstante, que “la modalidad de pago siempre fue igual, antes durante y a posteriori de Fútbol para Todos”.
“La AFA no daba indicaciones. El cheque se le daba al club y el club era el dueño del cheque a partir de ese momento. No había ningún direccionamiento” sobre cómo obtener el dinero. Uno de los reproches penales es que los clubes cambiaban los cheques por efectivo en cooperativas o financieras. Hubo más de 20 de esas entidades bajo investigación. Hoy queda sólo una. Acaso algo haya fallado en los argumentos para convencer al Poder Judicial de que esa única involucrada era igual a las otras que habían sido desvinculadas del proceso.
Cherquis recordó que Ocaña “armó la denuncia “diciendo que había distracciones de dinero. La legisladora tenía un libreto, no estaba muy consustanciada con el tema pero mediáticamente instaló que FpT constituía un delito para las arcas del Estado”.
El ex vocero de Grondona evocó el entramado mediático para darle volumen a la denuncia: “Cuando me reuní con los periodistas que entrevistaban a la diputada Ocaña me decían ‘me la pidieron’, ‘viene de arriba’. La clásica, temeraria, antiética e inmoral. Periodistas que actuaban de voceros. No entrevistaban a Ocaña porque el tema les interesaba sino que el tema configuraba un hecho político por el cual podía factibilizarse retomar los derechos del fútbol”.
“Colegas cobardes y sin dignidad”, remató Cherquis.
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Néstor Espósito: @nestoresposito