Redacción Canal Abierto | Si bien recién a principios de 2018 Mauricio Macri enviará al Congreso el pliego de su aspirante al puesto, ya comenzaron las especulaciones y operaciones mediáticas entre quienes disputan el lugar que quedará vacante desde el próximo 31 de diciembre.
No pasó ni una semana de la renuncia de Alejandra Gils Carbó y ya comenzaron a sonar los nombres para su reemplazo: el jurista Alberto García Lema, los jueces Ricardo Recondo, Mariano Borinsky y Gustavo Hornos, la diputada Margarita Stolbizer y los fiscales Ricardo Sáenz, Marijuan, Raúl Pleé, Carlos Rívolo y José María Campagnoli. Este último, candidato de Elisa Carrió.
El primero en marcar la agenda sobre el tema fue el jefe de Gabinete, Marcos Peña, quien en la conferencia de prensa posterior a la presentación de Mauricio Macri en el CCK afirmó: «no tiene que ser alguien de militancia política, sino un profesional reconocido por su trayectoria». Sin hacer referencia directa, dichos requisitos parecían excluir, en principio, a Stolbizer.
Ni lento ni perezoso, Campagnoli esta mañana ya dejó entrever en declaraciones a la prensa su interés por el puesto de jefe de todos los fiscales. «Aceptaría ser Procurador General de la Nación si me lo proponen”, afirmó en el programa matutino de Jorge Lanata en Radio Mitre.
El fiscal de Saavedra es la apuesta fuerte de «Lilita», quien luego de su arrasador triunfo en las últimas legislativas se siente con el respaldo para imponer hombres de su confianza en puestos clave. En noviembre de 2015, a pocos días de la asunción de Macri, la diputada Carrió ya hacía explícita su preferencia, y marcaba la cancha: «Quiero que el procurador sea José María Campagnoli».
“Es un paso muy importante rumbo al fortalecimiento de la institución. La doctora Gils Carbó contribuyó con sus acciones al debilitamiento del ministerio público fiscal, básicamente con su falta de independencia”, había manifestado algunas horas antes, y en línea con el Gobierno, Campagnoli.
“Ella demostró su afinidad con el gobierno anterior no solo con sus actos sino también encabezando la agrupación denominada Justicia Legitima. También promovió mi juicio político por investigar a Lázaro Báez”, añadió.
En el año 2014 Campagnoli era el fiscal con mayor número de denuncias en su contra, 20, la mayoría de jueces, otros fiscales y abogados particulares. Los motivos casi siempre se repetían: abuso de poder, mal desempeño e irregularidades en la investigación.
Ese mismo año la Cámara en lo Contencioso Administrativo confirmó un fallo unánime que ordenaba la suspensión de Campagnoli y su remisión a juicio político por mal desempeño en sus funciones. Sus abogados, periodistas y políticos opositores a Cristina Fernández de Kirchner planteaban que la avanzada sobre el fiscal se daba en el marco de un caso de censura por la investigación que llevaba a cabo contra Lázaro Báez.
No obstante, por aquel entonces la Procuraduría contra la Violencia Institucional (PROCUVIN) denunciaba la existencia en la sede de la Fiscalía de Saavedra de mas de mil fotos de habitantes del Barrio Mitre, todas tomadas sin autorización. Según trascendió en su momento, «las fotos eran utilizadas para inducir a víctimas de delitos que acudían a realizar una denuncia para que las reconocieran y, así, abrirles una causa», y que «en el álbum, aparecen imágenes de chicos, muchos de 10 y 11 años, algunos de los cuales aparecen llorando, e incluso la foto frontal de un bebé en brazos de su padre».
El 17 de julio de 2014, siete meses después de su suspensión, Campagnolia era restituido por cuatro votos contra tres.
Además del apoyo de “Lilita”, al polémico fiscal le juega a favor su afinidad y buen desenvolvimiento con medios de comunicación cercanos al oficialismo.