Redacción Canal Abierto | Este jueves, tras cuatro meses de lucha contra los despidos y el vaciamiento de los yacimientos carboníferos, los mineros de Río Turbio dieron a conocer la noticia de la reincorporación de 171 empleados, de los 500 que cesantearon.
Al respecto, el secretario general adjunto de ATE río Turbio, Cristian Gordillo, explicó: “500 compañeros fueron despedidos por las políticas de miedo y extorsión que aplicó el yacimiento sobre los trabajadores. Lamentablemente sólo 171 fueron reincorporados. Hubiéramos querido que los 500 compañeros se quedaran, pero los retiros extorsivos terminaron sembrando semillas en ellos”.
Según la resolución, los trabajadores serán reincorporados reconociéndoles los días desde la fecha en que fueron desvinculados, y se reintegrarán en las mismas condiciones en las que trabajaban anteriormente.
Sin embargo, luego de una ardua negociación que duró más de nueve horas, también se les informó que ahora están dentro de un procedimiento preventivo de crisis.
Alejandro Alaniz, minero de Río Turbio, dijo sobre esto: “Este procedimiento preventivo de crisis, según los abogados que consultamos, se dicta solamente en empresas privadas porque es una preventiva de quiebra, y una empresa del Estado no se puede declarar en quiebra. Partiendo de esta base nosotros estamos entrando en una situación totalmente ilegal, pero el Ministerio de Trabajo lo avaló porque es parte del Gobierno. El procedimiento te explica los pasos a seguir, te dice que pueden seguir despidiendo gente porque es una reducción, congelar los sueldos, y hasta mandarte a la casa pagándote el monto mínimo durante seis meses”.
Si bien los trabajadores entienden que aún no se ganó la batalla, reconocen que la nacionalización del conflicto fue clave para que la discusión con el Ministerio suceda, y permitiera que los trabajadores sean reincorporados a sus puestos.
“Lo que habilitó esta negociación es que nosotros nunca dejamos de insistir. Fue un esfuerzo muy grande salir de la cuenca carbonífera. Mucho sacrificio, monetario y humano, dejar las familias para pelearla y nacionalizar el conflicto. Y lo que molestó mucho al Gobierno -tanto nacional como provincial- y a la intervención, fue nuestra llegada a Buenos Aires. Molestó muchísimo que saliéramos en la tele a mostrar la represión, y decidieron cortarlo. Y la mejor forma era esta. Darnos una solución, pero dejándonos en estado de alerta”, expresó Alaniz.
Asimismo, los mineros reconocieron la importancia del acompañamiento sindical. “Todos los sindicatos nos acompañaron. Nos recibían con los brazos abiertos. Fue una movida espectacular. Y todo eso tiene repercusión. Buenos Aires es una caja de resonancia y hay que hacerla sonar. Sentimos la unidad y lo que significa la solidaridad por parte de otros sectores. Nos sentimos muy acompañados por nuestros compañeros trabajadores”.
Por otra parte, anunciaron las medidas a seguir. “Nosotros sabemos cuál es el rumbo que tiene que tomar el yacimiento y con un buen diálogo podemos revertir un montón de cuestiones como lo es este procedimiento preventivo de crisis. Esto es un pequeño paso porque detrás hay mucho más. Por eso, el sábado tenemos una asamblea general y vamos a resolver levantar las medidas y explicar la situación en la que estamos al resto de los compañeros. Esta reincorporación tiene sabor a victoria, pero todavía no podemos sentarnos a disfrutarla, finalizó Gordillo.
Fotos: Luciano Dico