Redacción Canal Abierto | Mientras el Frente Renovador local presenta un proyecto para declarar a Misiones como provincia «pro vida», sus representantes intimidan a los periodistas que preguntan sobre su iniciativa.
«Le pregunté al legislador que fui a entrevistar, que se llama Nicolás Daviña, sobre su postura acerca de este proyecto de declarar ‘pro vida’ a Misiones. Entonces él me dijo que estaba a favor de estas instancias que habilitan el debate, que era muy bueno para todos discutir estos temas, a lo que yo le planteo que esta iniciativa es en realidad clausurar el debate a favor de una de las posturas», explica Alicia Rivas, periodista de FM Universidad y productora de Otro Poder.
Tras este hecho, el diputado se «sintió incómodo con la pregunta». Según el relato de Rivas, la entrevista siguió y Daviña declaró que el proyecto de legalización y despenalización del aborto que ya tiene media sanción en Diputados y será votado en el Senado el 8 de agosto algunos puntos «eran inconstitucionales», lo que motivó que la periodista indagase sobre cuáles eran los puntos del proyecto en riña con la Constitución.
«Ahí el legislador me dijo que si podíamos cortar la entrevista porque no se sentía cómodo, y a nosotros (junto al camarógrafo) nos pareció que también había que cortarla porque era irrelevante también la charla y él estaba incómodo. Me tuvo un rato convenciéndome de que no saliera ese fragmento de la nota aunque ya le habíamos dicho que no iba a salir. Después se comunicó con el productor responsable del programa, para manifestarle su preocupación de que saliera esa parte de la nota y, no contento con eso, también lo planteó en el bloque del Frente Renovador, lo que yo entiendo que es predisponer al resto de los legisladores a la hora de hacerle consultas en el trabajo que yo hago semanalmente en la Cámara».
Uno de los integrantes del bloque, luego de la intervención de Daviña, le dijo a Rivas que «hay que tener cuidado con esas preguntas»
La periodista cuenta que se sintió «intimidada» y «que lo que hubo fue un intento de censura de la nota» y de «presión» sobre su trabajo. «Esta es una forma de violentar e intentar clausurar una discusión», aclaró la periodista, en una provincia donde «las violencias contra las mujeres son palpables».