Redacción Canal Abierto | En una movilización que convocó a miles en Plaza de Mayo, el pedido de justicia para Santiago Maldonado se hizo escuchar.
A un año de su desaparición forzada seguida de muerte, el pueblo se reunió para recordarlo, para mantener vivo su espíritu de lucha y seguir exigiendo respuestas.
Sergio, su hermano, envuelto en emociones, tomó la palabra y expresó: “Debemos soltar a Santiago, como ese ser libre que era. Debemos entender que Santiago no es sólo de nuestra familia. Santiago trascendió y atravesó los corazones de todas y todos aquellos que lo sienten propio”.
El caso, no sólo evidenció el conflicto por las tierras ancestrales de los pueblos originarios, sino que expuso el accionar represivo de las fuerzas de seguridad del Estado, avalado cada vez más por un gobierno que premia a sus mejores soldados. A gendarmería, por desaparecer a Santiago, a Prefectura, por matar a Rafael Nahuel, a la Policía, que se carga una muerte cada 23 horas por gatillo fácil.
Es esta lucha la que convocó ayer a cientos de organizaciones de derechos humanos, de víctimas de la represión y la violencia institucional, a madres que perdieron hijos, nietos.
«Seguimos exigiendo verdad y justicia, y queremos que este 1º de agosto sea el punto de partida para la unidad en defensa de los derechos humanos por encima de cualquier diferencia partidaria», agregó Sergio.
Con esto, le juró lealtad y compromiso de lucha a su hermano, hasta conseguir que los responsables paguen por lo que hicieron.
Por otra parte, todos los presentes exigieron la renuncia de la ministra de Seguridad, Patricia Burllrich. “El Gobierno, busca incrementar los niveles de represión interna”, se oyó en el acto, y Sergio manifestó que, “si este gobierno es indiferente, Santiago es solidaridad”.
Y así como el año pasado, como cada vez que se nombra a Santiago, la misma Bullrich mandó a iniciar la cacería. Paula Ramírez, Federico Rodríguez da Costa, Naico Brunet, Leandro Calvo y Brian Garcia fueron violentados y detenidos al finalizar la movilización. Fueron víctimas de una represión sin necesidad de causas. Mientras, les imputaron «atentado y resistencia a la autoridad y daños».
El 1 de agosto de 2017 la comunidad Mapuche de Cushamen, cortó la ruta para reclamar la libertad de su lonko. Cuarenta y cinco gendarmes, un camión y dos camionetas entraron en territorio mapuche para perseguir a ocho hombres. Santiago escapó con ellos y llegó hasta la orilla.
Estuvo desaparecido 78 días. Su cuerpo sin vida fue encontrado el 17 de Octubre en el Río Chubut, 400 metros río arriba de donde fue visto por última vez.
El único imputado en la causa, el gendarme Emmanuel Echazú, fue ascendido por la ministra de Seguridad al grado de alférez. Todavía nos preguntamos: ¿Qué pasó con Santiago?
… “Mientras tanto, tratá de descansar, como puedas y como te dejen”.
Fotos: Luciano Dico
Video y edición: Pablo Martínez Levy