Redacción Canal Abierto | Indiferencia, maltrato policial y violencia en los organismos públicos son algunos de los dramas que cada día afrontan las 6337 personas que -según Proyecto 7- se encuentran en situación de calle en la Ciudad de Buenos Aires.
En las últimas horas, debido a la Cumbre del G20, esta cruda realidad se agudizó para los cerca de 200 hombres, mujeres, niños y niñas que duermen en las calles céntricas de una Ciudad sitiada por la Cumbre del G20.
Las amenazas, aprietes y el desalojo de estas personas en condición de vulnerabilidad tuvo incluso episodios de violencia física por parte de la Policía de la Ciudad. “Un compañero en Paseo Colón se resistió, defendiendo su derecho ciudadano, y le rompieron el brazo para sacarlo por la fuerza”, contó a Canal Abierto Horacio Ávila, referente de Proyecto 7 (organización integrada por gente en situación de calle). “Obviamente, esta persona no quiere hacer la denuncia ya que la semana que viene probablemente vuelva al mismo lugar, y la policía que lo agredió también”.
El martes pasado el programa Buenos Aires Presente (BAP) de Horacio Rodríguez Larreta salió “apretar” a los “sin techo” para que se retiren del centro porteño. Uno por uno, los funcionarios fueron amenazando a la gente en situación de calle. “El mensaje era que si no se iban tal día, los sacaban por la fuerza. No era para que estén mejor, porque estaban preocupados por su salud o darles una oportunidad. No cabe duda que el Gobierno quiere ocultar la pobreza, y el mensaje es claro: `no queremos que ustedes, los negros de mierda estén acá mientras llegan los presidentes de todo el mundo´”, explicó Ávila, y planteó un paralelismo entre el evento internacional en ciernes y la visita a Argentina en 2016 del ex presidente norteamericano, Barack Obama.
Este año será la primera vez que Argentina reciba a los principales líderes del G20 y presida el grupo de las economías más poderosas del mundo. El ministerio de Seguridad que encabeza Patricia Bullrich anunció un gasto de 100 mil millones de pesos en la compra de armas, equipos antidisturbios y proyectiles que serán destinados a la seguridad del evento. Según fuentes oficiales, se adquirieron 180 escopetas, y 15 millones de balas de goma, 2.000 proyectiles de gases lacrimógenos y chalecos policiales, 6.000 vallas de contención, 15 millones de balas de goma, 9.100 chalecos multiamenaza, 2 millones de cartuchos de bala 9 mm, 3.150 juegos de cascos, escudos, máscaras antigas y bastones para policías y gendarmes, así como 4.900 precintos plásticos de seguridad que se utilizan a modo de esposas para detenidos.
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En este marco, las organizaciones que integran la “Confluencia Fuera G-20/FMI” confirmaron la convocatoria a movilizar este viernes 30 de noviembre: concentrarán a las 15 en San Juan y 9 de julio para cerrar con un acto frente al Congreso.
“Vivimos un estado de sitio encubierto”, lanzó Ávila. “Ayer en la calle veíamos sobrevolar helicópteros con militares armados que iban colgados, en una clara demostración de fuerza e intimidación”.
Días atrás Proyecto 7 lanzó una campaña con volantes para que la gente en situación de calle se ponga en contacto ante cualquier amenaza. “Incluso se comunicaron vecinos preocupados por la seguridad de nuestros compañeros, y no de los presidentes. Vamos a tener nuestros centros abiertos y en alerta para ayudar a quien lo necesite”, informó su referente. 
Cabe recordar que, en promedio, la situación de calle provoca casi 100 muertes anuales en toda la ciudad de Buenos Aires. “Es mentira que el frío mata, lo que mata es la desidia y violencia del Estado”, sostuvo Ávila.