Redacción Canal Abierto | Esta semana, el presidente Mauricio Macri y sus funcionarios inauguraron un nuevo tramo de la autopista en la Ruta 8 que une los municipios de Pilar, Exaltación de la Cruz, San Antonio de Areco, Capitán Sarmiento, Arrecifes y Pergamino.
La obra fue una de las promesas de la campaña presidencial en 2015, y Macri aprovechó la ocasión para vanagloriarse. «En 4 años hicimos el 90% de la obra que hace 40 años esperan los vecinos», aseguró.
Lo que se olvidó fue de algunas cuestiones básicas de seguridad para los vecinos de la zona rural que deben transitar por allí. “El paso hacia el pueblo y la escuela está cerrado, por lo tanto los chicos no están asistiendo a clases. En caso de emergencias, una ambulancia tiene que recorrer más de 30 kilómetros para poder trasladar a quien lo necesite”, denunció Tania Medina, vecina del kilómetro 83.
Desde la inauguración, los habitantes de Exaltación de la Cruz realizan cortes para reclamar esta situación. “No se construyeron colectoras o dársenas, y con tránsito pesado que pasa por acá, no tenemos resguardo. De hecho ya hubo accidentes que involucraron a más de cuatro vehículos”.
Los vecinos -que el mes pasado sufrieron la fumigación de la escuela mientras los chicos estaban en clases- también fueron amenazados por el personal de vialidad. “Llegaron a la noche en medio de un corte y nos dijeron que por las buenas o por las malas la autopista se va a abrir. También nos informaron que se tardará entre 8 y 9 meses en construir un puente en el kilómetro 84 para tener retorno de ambos lados”.
La obra completa tiene un costo previsto de $ 12.600 millones y plantea convertir el tramo Pilar-Pergamino de la ruta 8 en autovía. Se extenderá por 168 kilómetros, divididos en nueve tramos.