Redacción Canal Abierto | Los trabajadores de la Cooperativa 8 de enero (ex Sport Tech) lograron la propiedad del inventario de la fábrica textil en la que trabajaban. Así lo dictaminó un fallo del Juzgado Comercial Nº 25 a cargo de Horacio Robledo, haciendo el lugar al pedido de los trabajadores que demandaban poder seguir produciendo.
El fallo de Robledo incluye las maquinarias, materias primas y transportes con los que contaba la fábrica. Por otra parte, se iniciaron diálogos con los propietarios del inmueble a fin de renovar el contrato de alquiler del predio en el que se emplazaba la empresa.
Así es que, a partir del lunes, volverán a ingresar al predio tras 6 meses de lucha que comenzó con un paro en enero, exigiendo salarios, aguinaldos y bonos adeudados. Esto devino en la conformación de la cooperativa, ante el pedido de quiebra presentado por la empresa, propiedad de Pablo Enrique.
“Tenemos clientes que hace seis meses que están esperando para poder trabajar. Ahora van a poder cumplirles. Además de estos clientes, vamos a estar trabajando para que las marcas vuelvan a confiar y trabajar con nosotros” manifestó Mirta Franco, integrante de la cooperativa en referencia a Puma, Nike y Adidas, las principales firmas que contrataban los servicios de la empresa.
El fallo firmado hoy pone fin a más de 5 meses de incertidumbre para los integrantes de la cooperativa. También es el fruto de una lucha que incluyó maquinazos frente al Congreso Nacional, a donde las trabajadoras se movilizaron para visibilizar su situación el 8 de Marzo, en el marco de la Jornada de Paro Nacional de Mujeres con motivo del Día Internacional de la Mujer y el acampe frente a la fábrica en el que seguían produciendo.
“Para lograr esto siempre tuvimos en mente seguir trabajando”, manifestó Franco. “Queríamos mantener nuestros puestos de trabajo porque no teníamos a donde ir. Hoy no hay puestos de trabajo. Donde hay trabajo son 12 horas por 14.000 pesos por mes. Eso no te cubre el boleto”, indicó.
Durante todo el proceso que logró el fallo de hoy, los trabajadores estuvieron acompañados por el Sindicato Unido de Costureros y Empleados del Vestido y la CTA Autónoma. “Este apoyo fue lo que nos motivó. Porque ellos nos brindaron las herramientas para contar con un nuevo sindicato textil. La CTA Autónoma fue muy importante y lo va a seguir siendo, porque nosotros pertenecemos a la CTA Autónoma. Desde el principio hasta hoy están con nosotros” dijo Franco.
“Cuando a un trabajador le pasa lo que nos pasó lo que a nosotros no hay que agachar la cabeza y hay que luchar para salir adelante para que no haya otro Pablo Enrique. Ese señor debería estar preso, porque nos estafó a nosotros y a mucha gente” concluyó Franco.