Por Hernán López Echagüe | Te deja sin aliento, la cara fruncida de perplejidad. A medida que uno pasa las hojas, y de pronto vuelve sobre esas páginas para corroborar que lo que acaba de leer es veraz, es decir, un manual de instrucciones destinado a docentes y directivos de escuelas y colegios para que sepan cómo identificar a pibes subversivos y entonces delatarlos. Qué decir, qué escribir. Viene a cuento recordar que a lo largo de la dictadura militar cientos de estudiantes secundarios, cuya edad iba de los catorce a los veintidós años, fueron secuestrados, torturados y posteriormente asesinados.
Pero continuemos con otro pasaje de este manual que promovía la persecución y el aniquilamiento de adolescentes que habían cometido el pecado de procurar en la militancia política una manera de transformar la realidad. Es una buena muestra del ideario y la enajenación de la dictadura:
e) Esquema de la subversión en la ARGENTINA.
Para tener una idea general y a la vez sintética del accionar marxista en nuestro país, recurriremos al gráfico Anexo 1. De su observación podemos deducir:
1) Que el proceso subversivo parte de una base filosófica e ideológica (MARXISMO)
2) Que esa ideología de por sí, engendra una “voluntad de poder”.
3) Que para lograr el poder, necesariamente precisa una política que la guíe y oriente para la consecución del objetivo.
4) Que dicha política debe canalizarse inexorablemente a través del pueblo, porque de allí obtendrá la masa necesaria.
5) Que la captación de esa masa se ejecutará aprovechando las ”frustraciones” reales o aparentes que la misma posea.
6) Que .lograda la captación podrá recorrer dos caminos hacia la conquista del poder, ambos convergentes y en apoyo mutuo.
7) Que esos dos caminos, son la acción insurreccional de masas y la acción armada.
8) Que la acción insurreccional de masas (flecha de la derecha en el gráfico Anexo 1), se realiza en base a la siguiente metodología: (ver Apéndice 1 del Anexo 1).
a) Se parte de la premisa que en la sociedad existen sectores que poseen aspiraciones e intereses comunes, debido a su proximidad geográfica, similitud de actividades, igualdad de nivel cultural, económico o laboral, etc. (Ejemplo: sector estudiantil, sindical, barrial y otros)
b) Consideran que en estos sectores (denominados “frente de masas”), existen organismos (llamados “de masas”) que dirigen las aspiraciones del conjunto (sindicatos, centros estudiantiles, vecinales, sociedades de fomento, ligas agrarias), intentan infiltrarlos y dominarlos para que sirvan a sus necesidades políticas o de otro orden. (Ejemplo: Agrupación FELIPE VALLESE en el gremio metalúrgico o Agrupación EVA PERÓN en el gremio de mecánicos).
En los casos en que fracasa la acción descripta en el punto anterior, se crean pseudos organismos paralelos que intentan disputarle a los legales, la dirección del conjunto y su representatividad. (Ejemplo: CGT de la resistencia).
Este procedimiento, en términos subversivos adquiere la siguiente denominación:
– Para el PRT “Poder dual”.
– Para MONTONEROS “construcción del poder Popular”.
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9) Que la acción armada, por las técnicas que emplea, se materializa en dos formas: la delincuencia subversiva urbana y la rural (flecha de la izquierda en le gráfico anexo 1).
10) Que la delincuencia subversiva urbana, si bien logra un grado de desarrollo, se caracteriza por su imposibilidad de lograr un control absoluto de un espacio determinado, por lo cual su acción queda ;imitada, a punto tal, que las sociedades atacadas se acostumbran a vivir con ella.
Como consecuencia de esta limitación, la delincuencia urbana está destinada a ser un elemento de uso principalmente sicológico para apoyar la acción insurreccional de masas e ir permitiendo la paulatina formación de un ejército regular.
11) Que la delincuencia rural trata de lograr el predominio y posteriormente el dominio de un espacio geográfico determinado, estableciendo así una “Zona Dominada”, que al comprometer un espacio geográfico y una población proporcionaría bases para organizar un “pequeño estado soberano”.
Esta situación permite a la subversión pasar a otra etapa de “militarización”; la organización de fuerzas regulares y el desarrollo de una guerra regular, posibilitando de esta forma, el ejercicio de un poder político soberano, constante y consolidado. La decisión final se obtiene dentro de una típica guerra regular (esto se pretendió hacer en la provincia de TUCUMÁN.
Todo lo expresado constituye un esquema básico que es factible configurar con el aporte de la experiencia e información recogida. Se debe aclarar que en modo alguno, este esquema se cumple en forma rígida; su aplicación depende de las condiciones reales de cada caso particular.
La línea de acción armada, partiendo de la delincuencia rural, fue empleada en CHINA, en VIETNAM y en CUBA. Mientras que en VIETNAM el proceso se cumplió hasta llegar a la guerra regular por la influencia de la situación étnica, geográfica relativa y de facilidades de apoyo externo, en CUBA sólo se llegó a una zona dominada y no alcanzó a desarrollar una fuerza regular. Esta etapa, combinada con la acción sobre las masas, fue suficiente para provocar la caída total del gobierno. Lo importante a tener en cuenta es que las dos líneas, según las circunstancias locales, coexisten y crean un camino coherente y viable para la conquista violenta del poder.
De allí su valor político desde el momento que pueden movilizar a los seguidores del marxismo y, al mismo tiempo, crear una vigencia política que incide sobre la población y el orden legal.
Según las posibilidades y conveniencias, estas acciones son utilizadas total o parcialmente combinadas.
Por esa razón, una delincuencia rural incipiente tiene una importancia que va mucho más allá del peligro militar real que ella misma signifique. Por sobre todo, la delincuencia rural constituye un paso más en un esquema posible, con el consiguiente efecto político.
Es necesario reiterar que tanto el accionar armado como el insurreccional de masas se apoyan en la población.
Lógicamente, el primero (accionar armado) puede ser cumplido con un respaldo de la población menos intensivo mientras que el otro (insurreccional de masas), requiere una mayor extensión de ese apoyo.
Se habrá notado que, en todo este esquema no se ha hecho referencia a la llamada conquista pacífica del poder. Ella, por el momento, ha sido dejada de lado por la subversión que actúa en la ARGENTINA, de neto origen marxista, especialmente luego de su fracaso en CHILE.
No obstante cabe señalar que la banda de delincuentes subversivos Montoneros, en su momento, creó y trató de incrementar al Partido Auténtico, como medio para actuar en el ámbito electoral.
En la actualidad a pesar que este procedimiento les está vedado, lo mantienen para su utilización eventual si las circunstancias lo aconsejaran.
Por otra parte, esa forma de operar no es otra cosa que una variante dentro del orden legal para alcanzar el gobierno y luego, desde él, procurar obtener el poder absoluto, promoviendo la acción armada y la acción de masas.
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