Redacción Canal Abierto | El Ministerio de Trabajo de la Nación dictó la conciliación obligatoria en el conflicto desatado entre Bridgestone y el SUTNA a partir del despido de ocho trabajadores. El mismo rige por 15 días e intima a las partes a retrotraer la situación a la condiciones previas al inicio del conflicto. La empresa deberá reincorporar a los despedidos y el gremio levantar las medidas de fuerza iniciadas el fin de semana pasado.
El Sindicato Único de Trabajadores del Neumático de Argentina (SUTNA) denunció que la compañía intenta aumentar los ritmos de trabajo en condiciones que atentan contra la salud de los operarios. Uno de los puntos es la exposición a altas temperaturas, situación que tuvo un agravante con la ola de calor vivida en el país en marzo.
Las presentaciones del gremio generaron inspecciones de la cartera laboral del gobierno bonaerense. Estas dieron la razón al reclamo e intimaron a la empresa a administrar los turnos en un esquema de 15 minutos de trabajo por hora y 45 de descanso. La resolución fue avalada por una mesa en la que además del ministerio de Trabajo bonaerense participan su par de Nación y la Superintendencia del Trabajo.
La respuesta de Bridgestone fue despedir a ocho trabajadores, lo que motivó un paro de la planta durante el pasado fin de semana. Ayer, el ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria.
Consultado por Canal Abierto, el secretario General del SUTNA Alejandro Crespo advirtió que “mientras un ministerio de Trabajo, que es el representante del Gobierno, exhorta a la empresa Bridgestone a dar solución a las condiciones de trabajo y la empresa reacciona con despidos, les sigue permitiendo la importación de cubiertas al país que reemplaza la mano de obra argentina y, a la vez, en este caso son las que escudan a la empresa ante las medidas de fuerza. Así reemplazan las cubiertas no producidas durante esos días”.
“Y lo hacen porque hay un dólar oficial y un dólar blue. Así que ellos terminan comprando en el extranjero con esos dólares oficiales y vendiendo a precios de cotización del dólar blue en el país ganando muchísimo más dinero que lo que ganarían produciendo”, reveló Crespo.
“En otras palabras, por un lado tenemos un gobierno que exhorta y parece que actúa correcto para los trabajadores y simultáneamente le permite tener las condiciones a la empresa de una zona liberada en la que los trabajadores no pueden defender las propias condiciones de trabajo que precisamente el mismo ministerio pedía que se intervengan sobre ellas”, sostuvo.
Crespo advirtió que el permiso de importación actúa como condicionante a la hora de poder realizar medidas de fuerza como la del año pasado: “Lo que ha sucedido en este conflicto es que ante una situación de semejante injusticia, donde el Ministerio de Economía ha seguido permitiendo el ingreso de estas cubiertas, es una preocupación para todos los trabajadores del neumático, porque ha crecido la cantidad de neumáticos importados que se puede realizar en el país”.
“En 2021 había una cerca de 45 millones de dólares de importaciones y la subieron a 65 millones de dólares en 2022 y a la vez lo que generaron es que este año en menos de tres meses ya acumulan cerca de 15 millones de dólares de importación”, agregó.
Sin embargo, destacó que aún ante esta situación el SUTNA sigue en estado de alerta y movilización. “Ayer, en el momento que se hacía la audiencia en el ministerio de Trabajo que derivaría en la conciliación obligatoria, simultáneamente se hicieron las asambleas en Pirelli y en Fate y se mantuvieron detenidas las plantas durante cerca de dos horas para que los trabajadores estén enterados y por supuesto prestos a defender a sus compañeros y a la propia organización”, afirmó Crespo.
Acerca del porvenir de la situación cuando concluyan los 15 días de conciliación obligatoria, Crespo adelantó que “defendemos la justa demanda de los compañeros de neumático para que el Ministerio de Economía también forme parte de la mesa de discusión. Que asuma sus responsabilidades y cese el ingreso de cubiertas extranjeras que son las que precisamente generan esa condición de zona liberada para que las empresas traten de cambiar condiciones porque no necesitan tanto la producción”.
Y denunció: “lo que está sucediendo de forma clara es que las empresas saben que esta situación en la que hay dos dólares, un dólar a 200 y un dólar a 500, no puede continuar, que eso es una situación artificial de la economía que en un momento va a terminar blanqueándose. Y una vez que eso suceda, ya no existirá el negocio de comprar a un precio y vender a otro. Y volverán a tener que ganar con la producción y por la diferencia que hay entre materia prima y precio final”.
“En esos momentos lo que ellos quieren tener es una mano de obra precarizada todo lo posible para poder sacar la mayor ganancia. En otras palabras, un gobierno que generó las condiciones económicas para que las empresas traten de generar esta situación tiene que tomar las precauciones porque no puede dejar una zona donde las empresas ataquen directamente a los trabajadores en estas condiciones”, agregó.
Y concluyó: “los que gobiernan tienen que gobernar sabiendo que no puede caer semejante situación sobre los trabajadores. En ese camino estamos y estaremos haciendo todas las acciones necesarias para que se modifique esta situación que es el fondo del conflicto”.