Redacción Canal Abierto | Los comicios de la provincia de Córdoba para elegir gobernador y legisladores, del pasado domingo 25 de junio, se vieron ensombrecidos por el retraso que sufrió el escrutinio provisorio, cerrado por la Justicia Electoral con el 94,90% de las mesas escrutadas recién a las 6:20 de la mañana del lunes.
Ambos candidatos mayoritarios, como el resto de la provincia, vivieron una noche tensa en espera de un resultado definitivo que se postergó debido a problemas en la carga de datos por parte de la Justicia Electoral.
Los guarismos relevados al momento dan una ventaja con una tendencia que se puede considerar irreversible, a pesar de los pataleos del derrotado Luis Juez, de tres puntos a favor de Martín Llaryora de la coalición Hacemos Unidos por Córdoba.
Finalmente, esa madrugada, el actual intendente de la ciudad de Córdoba anunció “su triunfo” señalando la irreversible tendencia a la vez que cuestionó al candidato opositor por echar un manto de duda sobre los resultados, y por ‘no dejarlo festejar’. “Los más perjudicados fuimos nosotros porque, en definitiva, no nos reconocieron un triunfo totalmente legítimo”, declaró el gobernador electo.
A primeras horas de la tarde de este martes 27, Luis Juez anunció que pidió a la justicia electoral la apertura de las urnas y la lectura de las actas correspondientes. Por su parte, el por ahora electo gobernador denunció que lo único que quiere es postergar la asunción de la derrota.
Acabo de impartir expresas directivas a los apoderados legales de Juntos por el Cambio, que soliciten a la justicia electoral la apertura de las urnas y la lectura de las actas correspondientes y que copia de lo solicitado se comunique el Tribunal Superior de Justicia.
— Luis Juez (@ljuez) June 27, 2023
“Hay que aclarar qué cosas no pasaron y qué cosas sí pasaron”, señala el especialista en seguridad informática cordobés Javier Smaldone, reconocido por haber advertido sobre los peligros del voto electrónico, en comunicación con Canal Abierto.
“No hubo ningún problema en el desarrollo de la elección, en la votación durante el día. No hubo ningún problema en los escrutinios de mesa, rara es la mesa donde el escrutinio terminó después de las 21, 21.30 horas, para ese entonces los votos estaban todos contados. Pero sí hubo severos problemas en el sistema de transmisión de resultados provisorios para el escrutinio, ahí estuvo la falla”.
La provincia vota desde 2011 con un sistema electoral que utiliza la boleta única de papel (Boleta Única de Sufragio, BUS). Este año se innovó en cuatro localidades con la incorporación del voto electrónico para la elección provincial y municipal, licitación ganada por el Grupo MSA S.A. para brindar el servicio y proveer las máquinas de sufragio. Esta misma empresa fue la encargada de proveer el sistema de transmisión de resultados que falló en este caso. La firma es la proveedora de Salta, Neuquén y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
“La Justicia Electoral de Córdoba decidió, de la noche a la mañana, usar por primera vez un sistema de la empresa MSA para hacer esta transmisión de datos para el escrutinio provisorio y hacerlo en la totalidad de las mesas de la provincia, son más de 9000. Eso, en términos técnicos informáticos, es una burrada, no se puede implementar un sistema crítico, como el de un escrutinio electoral, en tan poco tiempo y pretendiendo abarcar la totalidad de las mesas de una provincia como Córdoba”, explica Smaldone.
“Cuando se implementa un sistema nuevo, con la sensibilidad que tiene este tipo de sistema, se debe hacer progresivamente. Por ejemplo, eligiendo una elección de medio término, una elección legislativa, que es más simple, que es menos traumática, y comenzando por algunas localidades o algunos establecimientos educativos elegidos, para luego en la próxima elección abarcar más y finalmente llegar a la totalidad de las mesas”.
La novedad incorporada consistió en un sistema que utiliza ‘inteligencia artificial’ para escanear cada planilla de las mesas de votación, reconocer los datos y luego transmitirlos digitalmente, eliminando el telegrama como forma de envío de los resultados.
Complicando lo sencillo
“El sistema, básicamente, es una computadora más un escaner. El presidente de cada mesa junto con los fiscales llevan el acta de escrutinio de su mesa, el sistema la escanea y utiliza un programa de reconocimiento de texto que lo que hace es interpretar los numeritos de las actas. Hay un proceso de revisión manual donde las autoridades de mesa y los fiscales verifican que los números cargados sean los que efectivamente están escritos en la planilla, si es necesario se corrige. Finalmente se envían esos resultados al centro de cómputos y se imprimen los certificados de escrutinio que son las copias que cada uno de los fiscales y el presidente de mesa se llevan. Cada escuela tenía que tener un escáner y una computadora provistos por la empresa”, explica el técnico.
Otra causa del fracaso del sistema de escrutinio de MSA en Córdoba.
A los "técnicos" precarizados de las escuelas los contrataron por 2 horas de capacitación virtual, 2 horas presencial, 8 horas de simulacros y 12 de elección.
24 horas por $35.885 que aún no les pagaron. pic.twitter.com/nmDFwo0DZ4
— Javier Smaldone (@mis2centavos) June 27, 2023
La Justicia Electoral contrató a OCASA que a su vez tercerizó esta tarea en MSA. El costo total del contrato por la elección fue de $2.206.899.187. A su vez, MSA para dar asistencia en cada una de las 1400 escuelas, necesitó dos técnicos por establecimiento que fueron contratados, mal pagados y peor capacitados, a través de una agencia de recursos humanos que continuó la cadena de tercerizaciones e improvisación para un hecho tan sensible para nuestro sistema de gobierno como es una elección a cargos ejecutivos.
[mks_toggle title=»Negocios en tu cuarto oscuro» state=»open»]MSA es la empresa que se hizo conocida por proveer el sistema de voto electrónico en Salta y es la que va a proveer el sistema de voto electrónico este año en la CABA.
“Pero el problema no es MSA. En Argentina hay tres empresas que se dedican a esto: MSA, Indra y Smartmatic; las tres tienen prontuarios y podemos encontrar un montón de casos de problemas como el de este domingo. Los principales responsables son los funcionarios de la autoridad judicial o ejecutiva que deciden contratar a estas empresas que les venden espejitos de colores, porque no saben nada.
Sabemos que vamos a tener que votar cada dos años, por qué el Estado nacional, los estados provinciales, no se preocupan en adquirir las capacidades para poder llevar adelante una elección sin estos problemas. Muchas provincias argentinas, lo hacen, hay varias provincias argentinas que no salen a contratar empresas para hacer el escrutinio provisorio”.[/mks_toggle]
Se puede hacer mejor, más barato y con gestión pública
El gobierno de Santa Fe viene desarrollando, desde hace más de 6 años, un sistema de transmisión de resultados y escrutinio provisorio que ha sido probado y mejorado en varias elecciones provinciales. Lo inició la gestión socialista y lo continuó desarrollando la actual conducción justicialista.
“Conozco a gente que participó en distintos aspectos del proyecto a lo largo de estos años y me tocó ser veedor en una elección en la provincia de Santa Fe. Es una estructura que cuenta con un celular por escuela, en lugar de una computadora más un escaner. Con ese celular se sacan fotos de las actas con una aplicación desarrollada específicamente para eso, se envían los resultados a un centro de cómputos y allí hay 200 cadetes de la escuela de policía haciendo la carga. Son pibes que están súper entrenados y formados porque los tenés disponibles para hacer todas las capacitaciones y las pruebas necesarias. Ese conocimiento queda en el propio Estado”, explica el experto cordobés.
“De una cosa estamos seguros, si tenemos suerte, cada dos años hay votaciones, es lógico que como Estado ese proceso esté garantizado por instrumentos públicos. Es una cuestión crítica que no tiene ningún sentido meter ahí a una empresa privada que después encima despliega toda esta cadena de tercerizaciones y, como pasa ahora, nadie se hace cargo”, propone Smaldone.
Lo que sí permanece tercerizado en Santa Fe y otras jurisdicciones es el trabajo de logística que realizan el Correo Argentino u otras empresas del rubro, que se encargan de repartir y recoger las urnas, boletas, actas y todos los materiales necesarios para el comicio.
La falla
“Hay sobrada evidencia de que no fue un problema de conectividad en el sentido de que no se pudiera establecer la conexión a Internet. En todos los casos que hemos visto en la escuela había internet. La máquina, el sistema específico éste, no se podía conectar. Tenemos dos cascos súper claros de dos escuelas, una con ocho mesas y otra con nueve. Una de ellas es una escuela que queda a 400 metros del Palacio de Justicia en pleno centro de Córdoba. Al día de hoy, a esta hora aún no se cargaron los datos de esas escuelas”.
El experto destaca la improvisación de todo el sistema, que no se hayan previsto planes de contingencia para enviar los datos de otra forma. Internet –en caso de que fuese el hipotético problema– se puede proveer con un celular.
“Hubo problemas todo el tiempo. Los sistemas fallaron, se colgaban, tenían que reiniciarlo, hubo demoras, pero relativamente funcionó en el 80% de las mesas. En el 20% restante, directamente el sistema no funcionó. De todo ese lote se cargó un 15% entre las 23 horas y las 6:20 de la mañana. Claramente no había un plan B”.
No hubo problemas con la votación ni con el escrutinio de mesa, como señaló previamente Smaldone. “La elección no está viciada. El escrutinio definitivo va a dejar las cosas claras. Lo que está teñido de cierta duda o cierta sospecha, para mí infundada, es el escrutinio provisorio que llegó en definitiva a un 95% que tampoco es un tan mal número. El problema es que la diferencia entre los dos principales candidatos es del 3% y falta computar el 5% de las mesas”, reflexiona el programador. “Haciendo números rápidos, redondeando un poco, se contaron un millón 900 mil votos y falta contar 100 mil. Para revertir esa tendencia, en esos 100.000 votos restantes, Luis Juez tendría que sacar tres de cada cuatro votos, cosa que difícilmente pase porque ese 5% faltante se reparte uniformemente en toda la provincia, no es que faltan las mesas de determinado distrito”.
Por último, cabe señalar que el escrutinio definitivo será importante para terminar de definir la distribución de los cargos legislativos donde unos pocos votos pueden cambiar el reparto de bancas.
Al cierre de esta nota, Javier Smaldone detectó otra inconsistencia más que publicó en su cuenta de Twitter. “Son muy pocos casos y no afectan al resultado, pero sí la percepción pública. Lo que muestra esta falla es que el sistema ni siquiera tiene un control de consistencia básica. Esas mesas deberían estar como observadas, y no incorporarse en el total”.
339 electores habilitados, 1.133 votos procesados. 334,22% de participación.
Más votos que votantes, un clásico de la empresa MSA.https://t.co/vnVqcwls2w pic.twitter.com/6NGFroSW5J
— Javier Smaldone (@mis2centavos) June 27, 2023